El presidente Guillermo Lasso decretó este viernes el estado de excepción por dos meses en tres provincias de Ecuador donde el índice de criminalidad ha alcanzado niveles históricos, se anunció.
He declarado el estado de excepción en las provincias de Guayas, Manabí y Esmeraldas, a partir de la medianoche de hoy, dijo el jefe de Estado en un discurso transmitido por los medios estatales.
Con el toque de queda vigente desde las 23:00 hasta las 5:00, no se podrá circular durante 6 horas en 4 parroquias de las provincias de Esmeraldas y Guayas, en una medida para frenar la violencia vinculada al narcotráfico. El Decreto Ejecutivo Nº 411 especificó el toque de queda o restricción de circulación desde las 23:00 hasta las 05:00 en las parroquias de Esmeraldas en la provincia de Esmeraldas; Eloy Alfaro (cantón Durán), Ximena, Pascuales (cantón Guayaquil) en la provincia del Guayas.
Las personas que circulen durante el horario del toque de queda serán llevadas ante las autoridades judiciales, a menos que se encuentren realizando una de las actividades catalogadas como excepcionales, tales como personal de salud, agentes de seguridad, socorristas de emergencia, abogados y secretarios judiciales en el ejercicio de su profesión o cargo, funcionarios públicos, trabajadores de la cadena logística del sector exportador, viajeros con vuelos que operen en el horario del toque de queda, reporteros y equipos de noticias y cualquier otra persona que el Ministerio del Interior considere digna de una excepción.
El decreto prevé que las autoridades de tránsito nacionales y municipales ejerzan sus competencias para controlar la circulación de vehículos durante las horas del toque de queda.
En virtud del estado de excepción, se desplegarán unos 4.000 policías y 5.000 militares en las zonas incluidas en la medida.
El narcotráfico en Ecuador ha provocado un aumento de la delincuencia, que ha dejado 1.255 muertos desde principios de año, según cifras oficiales. Unos 440 crímenes han ocurrido en Guayaquil, centro comercial del país y capital provincial del Guayas, y en Durán. Desde febrero de 2021, también se han producido varias masacres en las cárceles de Ecuador en las que estuvieron implicados miembros de bandas de narcotraficantes rivales, con más de 350 reclusos muertos.