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Lazos diplomáticos con Chile dependen de tema marítimo, dice presidente boliviano
“El derecho de Bolivia al mar es un derecho inalienable e imprescriptible”, explicó Arce El presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, instó este miércoles al nuevo Gobierno de Chile a discutir el diferendo marítimo entre ambos países, del que necesariamente depende el futuro de los vínculos.
Durante un acto para conmemorar el Día del Mar y el 143 aniversario de la Defensa de Calama, Arce destacó que el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Chile sólo se logrará a través de una solución a ese asunto, que es consecuencia de la Guerra del Pacífico en la cual Chile derrotó a Bolivia a fines del siglo XIX.
Arce llamó al presidente de Chile, Gabriel Boric Font, a hacer suyas las palabras de su antecesor Salvador Allende cuando dijo en 1970: “Chile tiene una deuda centenaria con Bolivia y estamos listos para una solución histórica”.
“Bolivia y Chile tienen mayores oportunidades si trabajan juntos, superando el discurso de siglos pasados y avanzando en la diplomacia de los pueblos, generando diálogos de buena fe”, dijo también Arce, quien agregó que “el derecho de Bolivia al mar es un derecho inalienable e imprescriptible, sobre el territorio que le da acceso al Océano Pacífico y su espacio marítimo, tal como lo establece el artículo 267 de nuestra Constitución Política del Estado”.
De ahí que ”el restablecimiento de relaciones diplomáticas (con Chile) sólo será posible en el marco de la solución del tema marítimo pendiente“, prosiguió Arce.
El mandatario boliviano insistió en que privar a su país del acceso al mar fue una de las ”faltas internacionales más graves de Chile y que el daño inmenso que ha cometido en 1879 está en la conciencia internacional”.
Arce recordó que la guerra “seccionó más de 120 mil kilómetros cuadrados de territorio, con abundantes recursos naturales, además de 400 kilómetros de costa en el Océano Pacífico”. También argumentó que la situación de mediterraneidad ha aumentado la dependencia de Bolivia y le ha dificultado su participación en el comercio mundial. “Las consecuencias de este confinamiento no son solo económicas sino también políticas, sociales y culturales”, subrayó Arce, al tiempo que recordó que un acercamiento diplomático estaba dentro de las conclusiones de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.
