El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva dijo este martes en México que su país estaba retrocediendo bajo el liderazgo de Jair Bolsonaro, a quien espera sustituir tras las elecciones de este año.
Lula destacó en una entrevista con La Jornada que 116 millones de personas estaban sufriendo inseguridad alimentaria. El ex jefe de Estado ha llegado a México para reunirse este miércoles con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en el Palacio Nacional.
Tenemos un gobierno que no gobierna de verdad, que se centra en la mentira y no respeta absolutamente nada: ni a los indígenas, ni a los negros, ni a las mujeres... y trata a los gobernadores y a los alcaldes como enemigos, subrayó Lula.
La actuación de Bolsonaro es resultado directo del sentimiento antipolítico de las élites, con la ayuda de sectores mediáticos sembrados en Brasil, pero será superado este año en las urnas, se esperanzó Lula.
Las élites nunca aceptaron gobiernos que actuaran con independencia y a favor de los más pobres. La idea de que los hijos de los pobres pudieran entrar en las universidades, gracias a los programas de acción afirmativa y al apoyo financiero, nunca fue aceptada por las élites, explicó Lula.
Añadió que tras su fracaso en la derrota de gobiernos progresistas elegidos democráticamente, las élites crearon una especie de antipolítica con el apoyo de los medios de comunicación. A través de ese mecanismo promovieron la destitución de Dilma Rousseff y todos los cargos legales contra el propio Lula, señaló La Jornada.
Bolsonaro fue la consecuencia de eso. Después de tres años de gobierno, la esperanza de vida de los brasileños se ha acortado en cuatro años. Además, Brasil es el segundo país con mayor número de muertes por COVID-19. Hay hambre y las armas están repartidas por toda la sociedad, detalló Lula, quien destacó asimismo que Brasil y México son las dos mayores economías de América Latina y elogió a AMLO por consolidar la autonomía de México sin crear antagonismos.
Lula también dijo que era necesario ir más allá del comercio. Necesitamos trabajar en un mundo de cooperación, equilibrio y paz, con instituciones internacionales representativas y eficaces.
Los problemas ambientales, especialmente el calentamiento global, la pandemia y las brutales desigualdades dentro y entre los países, exigen una profunda reforma de la gobernanza mundial, prosiguió.
Al aterrizar en Ciudad de México, Lula fue recibido por el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelo Ebrard, a pesar de ser un ciudadano sin cargo oficial. Casi nadie, excepto el presidente ruso Vladimir Putin, recibe a Bolsonaro estos días, independientemente de su condición de presidente.
Bienvenido Luiz Inácio Lula da Silva, gran amigo de México y de la causa de la justicia. Inicias tu visita a nuestro país, donde eres querido y respetado. Muy feliz de verte entre nosotros, publicó Ebrard en Twitter.
Según informes de prensa, el viaje de Lula estaba originalmente programado para enero, pero tuvo que ser pospuesto debido a la pandemia del coronavirus.