El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, decidió este martes destituir al ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, por supuestos vínculos de este último con un narcotraficante brasileño, se anunció. Será reemplazado por Federico González.
Giuzzio fue citado a Palacio de Gobierno por el Presidente de la República luego de que se revelara su presunto vínculo con el narcotraficante Marcus Vinicius Espíndola Marqués de Padua.
El ahora exministro había admitido que utilizó una camioneta propiedad de Espíndola durante su viaje de vacaciones a Brasil. Espíndola ha sido detenido en su país natal.
La destitución de Giuzzio fue anunciada en conferencia de prensa por el Secretario Presidencial Hernán Huttemann, quien también dijo que Cecilia Pérez había sido designada como asesora en materia de seguridad de la Presidencia de la República.
El anuncio de Huttemann dejó en claro que Giuzzio no había renunciado por su propia voluntad.
González se comprometió a continuar en la lucha firme y decidida contra el crimen organizado, sus delitos conexos y la ilegalidad.
“Voy a trabajar en coordinación directa con el comandante de la Policía Nacional, con todo el equipo de seguridad y con toda la fuerza que sea necesaria para alcanzar ese objetivo”, agregó.
“No solo vamos a trabajar en coordinación y con todo el apoyo del Ministerio del Interior y el Comando de la Policía Nacional y todo el equipo de seguridad, las Fuerzas Armadas, la FTC y todo lo que abarca el campo de la seguridad, sino que también tenemos instrucciones expresas de trabajar para evitar la infiltración del crimen organizado en otras zonas”, señaló Cecilia Pérez.
El reemplazo de Pérez como ministra de Justicia aún no se ha anunciado, explicó Huttemann.
Antes del anuncio del martes, el fiscal paraguayo Federico Delfino había prometido investigar los vínculos de Giuzzio con el narcotraficante y formó un equipo para tal fin la semana pasada. “Por supuesto que se investigará a Giuzzio. Esta es información relevante para la investigación”, dijo a los periodistas.
Marqués de Padua está catalogado como uno de los mayores narcotraficantes de Brasil. Hace una semana fue detenido en Foz de Iguazú durante la llamada Operación Turf.
Según la Fiscalía, los vínculos de Giuzzio podrían haber hecho posible que el sospechoso Lindomar Reges Furtado siguiera prófugo.
“Hablé con el señor Vinicius en más de una ocasión, siempre sobre los servicios de su empresa y antes de tomar conocimiento de su participación en una organización criminal”, había asegurado Giuzzio en Twitter.