Manifestantes han tomado las calles de Haití este lunes para exigir que el primer ministro Ariel Henry acceda a mantener conversaciones sobre una posible solución a la crítica situación del país.
Los manifestantes quieren que Henry renuncie en medio de una violencia callejera incontrolable para que se pueda formar un nuevo gobierno. Levantaron barricadas de neumáticos en llamas y bloquearon calles en el área de Petion Ville, al sureste de la capital haitiana, Puerto Príncipe.
Según los informes, se escucharon disparos en otros barrios, mientras que los estudiantes de la región de Camp-Perrin también exigieron la reconstrucción de las escuelas destruidas por el terremoto del 14 de agosto del año pasado.
Organizaciones políticas y sociales también se movilizaron para defender el acuerdo de Montana por grupos de la sociedad civil y la diáspora haitiana para ayudar a establecer un nuevo gobierno en Haití, que atraviesa una profunda crisis política tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse el 7 de julio.
“La implementación del acuerdo del 30 de agosto de 2021 ha allanado el camino, ha llegado el momento de encontrar un compromiso con todos los demás actores importantes para sacar al país del impasse en esta construcción del consenso nacional, esencial para la resolución de esta grave y peligrosa crisis que enfrenta la nación”, señaló un documento presentado a Henry.
“Quedamos a su entera disposición para una reunión lo antes posible, con miras a encontrar juntos una solución a esta crisis profunda y multidimensional que ha durado demasiado. Haití, nuestro país, no espera menos que eso”.
La coalición política opositora eligió a Fritz Alphonse Jean como presidente y a Steven Benoît como primer ministro para asumir el cargo durante un período de transición, ya que expiró el mandato de Henry, quien ha estado actuando como primer ministro por el nombramiento firmado por Moïse en una de sus últimas decisiones antes de ser asesinado y la oposición afirma que su mandato está terminado.
Pero Henry no mostró signos de querer renunciar y dio un mensaje a la nación de 18 minutos, durante el cual insistió en que su autoridad había sido ignorada por quienes el 30 de enero nombraron al exgobernador del Banco Central Fritz Alphonse Jean como presidente interino.
“Nadie tiene la autoridad ni el derecho de reunirse en un hotel o en el extranjero para decidir en un pequeño comité quién será presidente o primer ministro. Todo esto es una distracción”, dijo Henry mientras insistía en que se estaban haciendo progresos para celebrar elecciones presidenciales. También prometió enjuiciar como terroristas a quienes dependen de las pandillas para tratar de tomar el poder a través de la violencia.
El presidente del Senado, Joseph Lambert, difundió un discurso grabado, en el que defendió que la legitimidad de Henry expiró este lunes, coincidiendo con lo que habría sido el final del mandato de Moïse y acusó a Henry de ser el principal obstáculo para el diálogo nacional.
Las calles de la capital estaban casi vacías este lunes en medio de una creciente violencia. “Durante mucho tiempo hay gente que piensa que puede tomar el poder con violencia. Durante días ha habido hombres que deciden perpetrar actos terroristas disparando a ciudadanos pacíficos”, dijo Henry.