Se espera que la Corte Suprema del Reino Unido se pronuncie este lunes sobre el destino de 31 toneladas de oro venezolano actualmente está en poder del Banco de Inglaterra. El banco central venezolano recurrió al sistema de justicia británico en 2020 para resolver el problema.
La decisión judicial debe determinar si el oro será entregado al Gobierno del presidente Nicolás Maduro o a Juan Guaidó, quien asegura haber sido designado presidente en funciones por la Asamblea Nacional tras las elecciones fraudulentas en las que Maduro basa su autoridad.
Maduro fue reelegido en mayo de 2018, pero Guaidó, titular de la Asamblea Nacional de Venezuela, afirma que la elección fue amañada y que él es el líder legítimo. Londres reconoce a Guaidó como presidente interino.
Ambas partes han creado comités de gestión del Banco Central de Venezuela (BCV), que han dado instrucciones divergentes sobre las reservas internacionales del país en oro, de las cuales el Banco de Inglaterra posee alrededor de mil millones de dólares, dijo la Corte Suprema en un comunicado.
Un tribunal de Londres falló inicialmente a favor de Guaidó, pero un Tribunal de Apelaciones respaldó la postura de Maduro. Guaidó ahora está impugnando esa decisión en la Corte Suprema, la instancia más alta de Gran Bretaña.
Los jueces tienen que decidir si el gobierno británico ha reconocido a Guaidó como jefe de estado de Venezuela y, de ser así, si cualquier impugnación de la validez de los nombramientos de Guaidó para el Directorio del Banco Central de Venezuela es justiciable en un tribunal inglés.
Maduro quiere recuperar el oro, pero hasta ahora se le ha negado el acceso porque no es visto como el legítimo jefe de Estado de Venezuela. Alrededor de 50 países, incluido Estados Unidos, aceptan el reclamo de Guaidó y no reconocen la reelección de Maduro en 2018.
La Corte Suprema escuchó tres días de argumentos en julio y debe dar su decisión final este lunes. Los abogados de Maduro argumentan que el Reino Unido, en realidad, reconoce que su cliente es presidente, especialmente a través de relaciones diplomáticas e insisten en que el oro podría ayudar a financiar la lucha de Venezuela contra la COVID-19. Guaidó dice que el dinero se usaría en cambio para reprimir al pueblo o terminaría en los bolsillos de un régimen cleptocrático.
Londres ha reiterado su apoyo a Guaidó, que no tiene poder real en el país, pero para mantener abiertos los canales con Caracas, el Reino Unido mantiene allí su embajada con una presencia diplomática reducida. La Corte de Apelaciones encontró solidez en este último argumento cuando falló en octubre de 2020, diciendo que una declaración del gobierno era menos importante que la realidad de sus tratos cotidianos con la administración de Maduro.
Si la Corte Suprema fallara a favor de Guaidó, sentaría un precedente para aspirar a otros activos venezolanos en varios bancos europeos. Estados Unidos ya ha confiado la gestión de los activos del país a Guaidó.