El mandatario peruano Pedro Castillo Terrones designó este martes a Carlos Jaico como secretario del Palacio de Gobierno en reemplazo de Bruno Pacheco, quien se vio obligado a renunciar en medio de una serie de escándalos de corrupción por los que ahora está siendo investigado.
”Lo que he visto es que él (Pedro Castillo) tiene un espíritu democrático bastante alto, sobre todo respeto a las instituciones y espera con calma y tranquilidad los resultados del JNE”, había dicho Jaico a los medios durante la campaña que llevó a Castillo a la presidencia.
En ese momento, Jaico dijo que su reunión con Castillo se había realizado a título personal y que había conversado sobre la situación política y económica del país con el entonces candidato.
Pacheco ha sido vinculado a dos presuntos actos de corrupción. Uno por tráfico de influencias en el proceso de ascensos de altos mandos de las Fuerzas Armadas y en el que también se investiga al exministro de Defensa Walter Ayala.
El segundo caso involucró una serie de charlas de Telegram donde Pacheco presuntamente presionó al jefe de la Oficina de Aduanas e Impuestos (Sunat) Luis Enrique Vera Castillo para favorecer a empresas y personas cercanas a él.
También se encontró que Pacheco guardaba US $ 20.000 en efectivo en su baño privado en el Palacio de Gobierno, según fuentes de los equipos que investigan su presunta participación en casos de corrupción. Consultado sobre el origen de ese dinero, Pacheco afirmó que provenía de sus ahorros y su salario bruto mensual de 25.000 soles (unos US $ 6.200) que ganaba desde hacía poco más de tres meses.
Luego de que Pacheco renunciara el viernes pasado, su oficina fue registrada en relación con el caso de los jefes del Ejército y la Fuerza Aérea que habían renunciado y lo señalaron por tráfico de influencia.
Pese a su renuncia, Pacheco ocupó su cargo hasta el martes, cuando se nombró a su sucesor. Jaico es un jurista y ex candidato al Congreso por el partido de centroderecha Alianza Para el Progreso (APP), lo que ha sido considerado por muchos como una señal más de Castillo de que se estaba distanciando de la alianza marxista Perú Libre bajo la cual fue elegido.
El líder de Perú Libre, Vladimir Cerrón, había advertido antes del nombramiento de Jaico que si finalmente sucedía, generaría un malestar popular irreversible.
Cerrón no pudo postularse para la presidencia debido a una condena previa por corrupción. La alianza entre Castillo y Cerrón duró apenas dos meses, hasta que el jefe de Estado expulsó a siete acérrimos ministros de Perú Libre de su gabinete y favoreció una serie más moderada de nombramientos.