La ministra de la Presidencia de Bolivia, María Nela Prada, anunció este jueves que el Gobierno nacional había resuelto retirar el Proyecto de Ley contra la Legitimación de las Ganancias Ilícitas en una medida para evitar una mayor confrontación entre connacionales.
La decisión se produjo luego de un paro nacional de 24 horas a principios de esta semana y populosas manifestaciones contra la iniciativa.
“Luego de intentos de desestabilización del país por parte de algunos grupos basados en campañas de desinformación, se decidió retirar el proyecto de ley contra la legitimación de ganancias ilícitas”, dijo Prada a los medios.
Insistió en que la decisión se tomó para no generar desestabilización, violencia y enfrentamiento.
La oposición consideró como un “triunfo” de la ciudadanía el anuncio de que se anule el proyecto de ley contra la Legitimación de Beneficios Ilícitos, Financiamiento del Terrorismo y Financiamiento de la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva o no convencionales.
La decisión también se tomó ante amenazas de nuevas medidas de fuerza por parte de la oposición, según Prada. El presidente Luis Arce y el ex presidente Evo Morales habían dicho que las protestas populares fueron un golpe de estado fallido.
El diputado Carlos Alarcón sostuvo que la decisión fue un duro revés para el Gobierno. Es un gran triunfo de la gente movilizada, de los sindicalistas, transportistas, mineros, empresarios profesionales y todos los ciudadanos que han expresado su rechazo contundente a esta ley que buscaba violar los derechos y garantías de los ciudadanos bolivianos.
El gobernador de Santa Cruz, Fernando Camacho, señaló que si el debate parlamentario hubiera continuado hasta su aprobación, cualquier ciudadano podría ser investigado arbitrariamente y despojado de su propiedad.
“UN NUEVO TRIUNFO DEL PUEBLO El pueblo boliviano movilizado obligó al gobierno de Luis Arce a retirar del organismo legislativo otra ley autoritaria del masismo (del acrónimo del partido gobernante: MAS - Movimiento Al Socialismo)”.
El ex presidente Jorge Tuto Quiroga expresó que los hechos fueron un estruendoso fracaso para el MAS. “Un rotundo fracaso del intento MASista de criminalizar la informalidad, expropiar la pequeña propiedad y convertir a nuestra sociedad en 'informantes'. No nos sentimos como una colonia cubana, ni una dictadura venezolana; seremos una #Bolivia (sic) soberana, libre y democrática”, dijo.
La mayoría de los sectores de la oposición estaban subiendo la apuesta con una huelga de 48 por delante si el gobierno de Arce hubiera insistido en que ese proyecto de ley fuera aprobado en el Congreso.