Aproximadamente un año después de su fecha de inicio original, los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 han comenzado oficialmente en lo que será un evento televisivo sin multitudes en el lugar debido a la pandemia de coronavirus.
La ceremonia de apertura de este viernes convocó a atletas de los 206 países participantes a desfilar ante un estadio casi sin espectadores, donde los anfitriones japoneses representaron piezas artísticas modernas y clásicas de su cultura ancestral.
Con 1.800 drones sobrevolando los cielos de Tokio, la tenista Naomi Osaka encendió el caldero olímpico. Fue su primera aparición pública desde que se retiró del Abierto de Francia en mayo, tras boicotear conferencias de prensa, lo que generó preocupaciones sobre su salud mental.
El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, abrió los Juegos con un mensaje de unidad y describió la ceremonia como un “momento de esperanza” en medio de la pandemia de covid-19.
La célebre canción Imagine de John Lennon fue entonada como parte de un repertorio más amplio que incluyó una presentación del teatro tradicional japonés Kabuki y un elaborado espectáculo de drones.
Los organizadores de Tokio 2020 también rindieron homenaje a los trabajadores de la salud cuando los atletas de todo el mundo desfilaron con sus rostros cubiertos por máscaras ante menos de 1,000 personas y bajo estrictas reglas de distanciamiento social, con carteles que pedían a los espectadores respetar las medidas sanitarias.
“Con el mundo en una situación difícil debido a la pandemia de coronavirus, me gustaría presentar mi respeto y expresar mi gratitud a los trabajadores médicos y a todos aquellos que están trabajando duro todos los días para superar las dificultades”, dijo el presidente del comité organizador, Seiko Hashimoto.