Luego de rumores de todo tipo, se anunció este viernes que los Argentina aumentaría paulatinamente la cantidad de viajeros que pueden regresar al país por el aeropuerto internacional Ezeiza de Buenos Aires.
Antes del 25 de junio, el límite era de 2,000 pasajeros por día, pero se redujo a 600 en un movimiento drástico para mantener a raya la variante Delta del coronavirus. Esa medida estuvo vigente hasta el viernes y, por lo repentina, dejó más de 10.000 argentinos varados en el exterior.
A partir del sábado 10 de julio, el nuevo límite se elevó de 600 pasajeros diarios a 5.200 por semana, o 742 por día, para la semana del 10 al 16 de julio; 6.300 (a razón de 900 por día) entre el 17 y 23 de julio y 7.000 (1.000 por día) entre el 24 de julio y el 6 de agosto.
Un comunicado de la presidencia insistió en que las fronteras siguen cerradas al turismo y que quien no sea argentino y quiera ingresar al país con el propósito de hacer turismo no podrá hacerlo.
Los vuelos de pasajeros de Reino Unido, Chile, Brasil, India y países africanos continúan suspendidos.
Mientras tanto, se permitirán dos barcos de pasajeros por semana en el puerto de Buenos Aires, pero al 50% de su capacidad.
Los viajeros del exterior tienen el mandato de aislarse en los lugares que determinen los gobiernos provinciales y de la CABA, durante 10 días a partir de la fecha de la prueba negativa realizada en el país de origen. La estancia en dichos lugares correrá a cargo del pasajero.
Se realizarán chequeos para garantizar que los pasajeros en cuarentena estén cumpliendo con su aislamiento, ya que de no ser así podrían enfrentar cargos criminales.
Los viajeros deben someterse a una prueba para poder abordar el avión con destino a Argentina. Además, se debe realizar una prueba a la llegada al país y otra prueba el séptimo día de ingreso. Quienes den negativo, al ingresar al país, deberán cumplir con el aislamiento en los lugares previstos por los gobiernos provinciales y la CABA y deberán realizar una nueva prueba para completarla.
Quienes den positivo al ingresar al país deben realizar otra prueba de secuenciación genómica y, junto con sus contactos cercanos, realizar el aislamiento en los lugares indicados por las autoridades nacionales.
Todas las pruebas y estancias en lugares de aislamiento correrán a cargo del pasajero, quien debe declarar los lugares donde estuvo en los últimos 14 días previos al reingreso al país.
Para el ingreso autorizado como excepción para la migración, a través de cruces terrestres, la jurisdicción provincial debe proporcionar corredores seguros. Los extranjeros no residentes que ingresen para desarrollar trabajos esenciales, con autorización de Migraciones, deberán cumplir con la cuarentena.
Las provincias deben controlar el cumplimiento del aislamiento de las personas admitidas desde el exterior.
En cuanto a los cruces terrestres, los extranjeros y nacionales deben tener una prueba Covid negativa válida por 7 días y realizada antes de iniciar el viaje cerca del lugar de residencia.
Los extranjeros que lleguen en barcos deberán permanecer a bordo y no tendrán relevo en el país; nacionales, realizar una prueba de antígenos dentro de las 72 horas siguientes al ingreso;
Los extranjeros que arriben en avión deben moverse en modo burbuja en el país y cumplir con los protocolos de salud; los nacionales pueden trasladarse al exterior bajo modalidad burbuja y realizar pruebas de antígenos al menos cada 15 días o menos. La regla también se aplica al equipo de transferencia si no ha seguido el modo burbuja.
Los transportistas deben informar a los usuarios de las restricciones vigentes, las condiciones que marca cada jurisdicción en la que reside el viajero y la posibilidad de que se modifiquen de acuerdo con la situación epidemiológica.
Se desaconseja a los ciudadanos y residentes argentinos viajar al exterior, especialmente aquellos que se encuentren en grupos de riesgo, a fin de evitar las dificultades y condiciones sanitarias requeridas al reingresar, considerando la rápida evolución de las condiciones epidemiológicas, mientras se continúan suspendidos los viajes grupales internacionales.