El Gobierno de Chile ha anunciado este jueves que el Área Metropolitana de Santiago volverá a estar en cuarentena total a partir de este viernes ante el aumento de las infecciones por coronavirus.
De este modo, siete millones de personas serán sometidas a un estricto confinamiento en uno de los países sudamericanos con mejores registros de vacunación.
Aunque en nuestro país hemos visto cierta estabilización de casos y en algunas regiones tendencias positivas, la Región Metropolitana nos preocupa más por la cantidad de habitantes y de camas de UCI disponibles, explicó la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza.
Se informó que la ocupación de camas de UCI en Santiago era del 98 por ciento el jueves, a pesar de que algunas áreas han estado bajo medidas de confinamiento total durante más de nueve semanas.
La disponibilidad de camas, dijo Daza, es uno de los elementos importantes de cara a la llegada del invierno, pues las bajas temperaturas llevan a las personas a encerrarse en lugar de estar al aire libre o reducir la ventilación de los espacios.
Daza admitió ser consciente de que la cuarentena es una medida muy dura. Pero “entendemos claramente los efectos negativos que produce. Después de mucho tiempo, esta medida tiende a disminuir su efecto”, dijo.
“Hoy, frente a la situación crítica que vivimos desde el punto de vista de camas críticas, es la medida que hemos visto como importante implementar, al menos durante las próximas semanas, para reducir las infecciones y disminuir la necesidad de camas, agregó.
Según las autoridades sanitarias, el jueves se registraron 7.716 nuevas infecciones y 198 muertes, lo que elevó el número total desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020 a 1,45 millones de infectados y 30.339 muertes.
A nivel nacional, 45.774 pacientes se encuentran en la etapa activa de la enfermedad, lo que significa que tienen la capacidad de propagar el virus y de los cuales más de 30.000 se encuentran en la Región Metropolitana, se informó, mientras que 3.266 personas permanecen hospitalizadas por Covid-19, de los cuales 2.798 están en soporte ventilatorio mecánico.
Chile no ha podido contener el avance de la pandemia, a pesar de desplegar una campaña de vacunación masiva desde principios de febrero, con más de 11,2 de los 19 millones de habitantes ya vacunados con al menos una dosis.
Consultadas por la variante Delta, que ya ha sido identificada en países vecinos como Argentina y Perú, las autoridades confirmaron que aún no ha sido detectada en Chile, que ha cerrado sus fronteras hasta el 30 de junio.
Además de las 52 comunas de la Región Metropolitana, muchas de ellas con cuarentena actual, hay siete localidades en otras regiones en circunstancias similares. Con las nuevas medidas, 11 millones de chilenos estarán bajo confinamiento total, se informó.
El propio ministro de Salud, Enrique Paris, se encontraba en aislamiento por síntomas de posible covid y aguardando el resultado del PR que resultó negativo. De ahí la presencia de Daza ante los medios.
Según el presidente de la Federación de Profesionales de la Salud, Fenpruss, Aldo Santibáñez, la situación de la crisis sanitaria del covid-19 en Chile es más crítica hoy que el año pasado. La situación este año es mucho más compleja que en el mismo punto del año pasado. Los niveles de contagio son muy altos e insistimos: el desgaste de los trabajadores del sector salud está en su máximo, tanto físico, emocional como mental.
Gabriela Flores, presidenta de la Confederación de Funcionarios de Salud, Confusam, dijo que ventilar a un paciente en el servicio de urgencias equivale al dilema de la última cama. Los servicios de urgencias no son los lugares para alojar a pacientes de esa gravedad. Los indicados son las Unidades de Cuidados Intensivos, dijo.
Y Patricia Valderas, presidenta de la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud, los pacientes con Covid-19 son ingresados en clínicas para que no mueran en casa”. En su opinión, Chile ya se encuentra en la tercera ola del coronavirus.