Esta semana se identificó una nueva variante del coronavirus brasileño, según las autoridades sanitarias de Río de Janeiro. La cepa P1 de Manaos parece haber mutado. Por lo tanto, la nueva versión ha sido nombrada P.1.2., señalaron los científicos.
La nueva variante P.1.2 se identificó en el 5,85% de las 376 muestras tomadas en 57 municipios del estado de Río, solo superada por São Paulo en el total de casos a nivel nacional.
Hasta ahora no se puede decir que esta variante sea más contagiosa o letal, que es una mutación de P1, dijo en un comunicado la subsecretaria de Salud del estado de Río, Claudia Mello. También explicó que la nueva variante se encontró principalmente en la región norte del estado de Río de Janeiro, pero también en el área metropolitana y en municipios costeros.
La variante mutante se detectó durante un plan de secuenciación de coronavirus financiado por todos los laboratorios públicos y universitarios del estado. El secretario de Salud de Río, Alexandre Chieppe, dijo que el estudio ayuda a verificar la incidencia de nuevas cepas y anticipa posibles escenarios epidemiológicos.
La P.1, ya detectada en al menos 50 países, es una mutación del SARS-CoV-2 que surgió a fines de 2020 en el estado brasileño de Amazonas y cuya virulencia está ligada al fuerte crecimiento de infecciones y muertes por coronavirus registrados en Brasil durante los últimos dos meses.
Detrás de la P.1 (91,49%) y P.1.2 (5,86%), las variantes con mayor circulación en Río de Janeiro son la B.1.1.7 (británica), con el 2,13% de los casos, y la P.2 (0,53%). esta última también en alza en este estado brasileño, según las secuencias genéticas del virus realizadas a partir de las muestras de 376 pacientes que contrajeron coronavirus en 57 municipios diferentes entre el 24 de marzo y el 16 de abril.
Varios científicos han advertido sobre la posibilidad de que, con la pandemia aún fuera de control, Brasil podría convertirse en la cuna de nuevas variantes más resistentes del covid-19.