Al menos cuatro buques pesqueros españoles, que operan habitualmente en el Atlántico Sur, la mayoría de ellos con licencia de Falklands, partieron hacia Vigo y Marín en Galicia, evitando las operaciones de transbordo en el puerto de Montevideo, Uruguay, según el líder marítimo y portuario del país.
Los buques son “Costa do Cabo” con unas 780 toneladas, “Playa Pesmar 1” 1.000 toneladas, “Playa Pesmar 2” 700 toneladas, “Pesca Vaqueiro” 1.100 toneladas. Y podría seguir Freimar UNO con 650 toneladas de calamar.
“La operación total involucró 3.850 toneladas de calamar, equivalentes a 40 pies 123 contenedores, y al parecer otras dos embarcaciones, Farruco y Fakir, también dejaron sin descargar unas 800 toneladas de calamar”, señala el informe, lo que significa una tremenda pérdida de actividad. y horario laboral del puerto de Montevideo.
El puerto de Montevideo es la opción logística más importante para los buques que operan con licencia del gobierno de Falklands y para las flotas que operan fuera de la ZEE Argentina
Además, otros dos buques españoles que habían contratado trabajos de mantenimiento en el dique seco de Montevideo Tsakos, cancelaron el pedido y han optado por instalaciones de dique seco en el estado insular de Cabo Verde en África.
Los primeros indicios de la desilusión española con Montevideo se dieron a conocer en el principal diario gallego “El Faro de Vigo” indicando que unos cuarenta de la flota de calamar de España opera en el Atlántico Sur, y la mayoría de ellos tiene como punto de concentración el puerto de Montevideo. Asimismo, para muchos arrastreros y palangreros en el Atlántico Sur y el Pacífico, Montevideo proporciona abastecimiento de combustible, logística, transbordo, turnos de tripulación, además de suministros y reparaciones.
Pero Montevideo se está convirtiendo cada vez más en un punto de llamada para la creciente flota asiática, que está agotando las pesquerías del Atlántico Sur, según el informe.
“La falta de espacio en Montevideo es un obstáculo endémico”, señaló a Faro de Vigo el presidente de la Cooperativa de Vigo, ARVI, Javier Touza, quien agregó que en ocasiones los buques pesqueros deben atracar en popa. A esto hay que tener en cuenta los altos costos del puerto de Montevideo, aún más complicado ahora con la pandemia de Covic 19.
“Por eso los pesqueros gallegos están huyendo de Montevideo buscando mejores condiciones en puertos alternos o regresando a Galicia. En nuestro caso, hemos trasladado nuestros tres barcos a Cabo Verde ”, dijo Touza.