El estado norteamericano de Missouri informó este martes que querelló ante un tribunal local al gobierno de China, al Partido Comunista chino y a funcionarios e instituciones de ese país, a los que acusó de haber ocultado datos sobre el coronavirus y causar de ese modo numerosas pérdidas de vidas y males económicos.
El fiscal general de Missouri, Eric Schmitt, anunció la acción judicial en un comunicado en el que responsabilizó a los demandados de haber ocultado información sobre la Covid-19 y de haber negado la naturaleza contagiosa de la enfermedad.
“Durante semanas críticas al inicio del brote, las autoridades chinas engañaron a la población, ocultaron información crucial, arrestaron a denunciantes y negaron la transmisión entre humanos pese a las pruebas crecientes”, dice la demanda interpuesta ante un tribunal del Distrito Este de Missouri.
La fiscalía responsabilizó a China y a sus instituciones y funcionarios de “destruir investigación médica crucial, permitir que millones de personas se expusieran al virus e incluso acaparar equipamiento de
protección individual, causando así una pandemia global que era innecesaria y previsible”.
La demanda sostiene que a fines de diciembre pasado, funcionarios de Salud de China tenían evidencias “serias” de la transmisión del coronavirus entre humanos pero solo reportaron el brote a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 31 de ese mes y no informaron que se contagiaba entre personas.
Agrega que pese al conocimiento que tenían sobre las características de la enfermedad, los funcionarios chinos “hicieron poco para contener su expansión” y cita datos publicados por el diario The New York
Times, según los cuales cerca de 175.000 personas abandonaron Wuhan -la ciudad donde se originó la pandemia- el 1 de enero para viajar por la fiesta del año nuevo chino.
El fiscal afirmó que el coronavirus “hizo un daño irreparable a países de todo el globo, ocasionando enfermedad, muerte, perturbación en la economía y sufrimiento humano”.
Missouri, en el centro de Estados Unidos, reportó más de 6.000 casos de coronavirus, con 220 muertos, mientras en todo el país -por lejos, el más afectado por la pandemia- se contabilizaban más de 820.000 contagios y de 44.000 decesos.