El chavismo que gobierna Venezuela no encarceló al presidente interino designado por el parlamento, Juan Guaidó, porque si lo hubiera hecho “en estos momentos sería un héroe” y, en cambio, prefirió dejar que “él mismo se destruyera”, afirmó uno de sus principales dirigentes.
“Si hubiéramos arrestado a Guaidó, en estos momentos sería un héroe, sería una bandera nacional e internacional, un mártir para Estados Unidos, y decidimos que él mismo se destruyera”, dijo el comisario Freddy Bernal en una entrevista publicada hoy por el diario madrileño ABC.
Guaido “actualmente es una basura política que pierde fuerzas y es más atacado por los representantes de la derecha que por nosotros mismos”, sostuvo el líder de los “colectivos” (grupos de civiles armados) chavistas. En su opinión, el presidente interino “ya no tiene discurso, no tiene seguidores y el imperio ahora no sabe cómo asumir que quisieron tomar este pelele para dirigir una contrarrevolución, que ha sido todo un fracaso”.
Bernal atribuyó la decisión de no apresar a Guaidó a la evolución política del mandatario Nicolás Maduro. “Nuestro presidente ha desarrollado un buen olfato político y ha aprendido cuándo apretar y aflojar”,
dijo.
Graduado como oficial de policía, Bernal fue electo diputado en 1998 por el Movimiento V República, el partido con el que Hugo Chávez accedería al gobierno un año después.
Desde entonces ejerció cargos legislativos y ejecutivos, y actualmente desempeña tres funciones en forma simultánea: coordinador nacional de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP, programa de distribución de alimentos), comisario general en el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y “protector” del estado Táchira (cargo creado por el chavismo para designar una suerte de gobernadores paralelos en aquellos distritos administrados por la oposición).
Además, Bernal es uno de los vicepresidentes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y está a cargo de la conducción de los “colectivos