El Papa se ha comprometido a tomar todas las medidas posibles para que los crímenes de abuso sexual no se repitan en la Iglesia, tras concluir la cumbre histórica de cuatro días en el Vaticano junto a jerarcas episcopales de todo el mundo.
Queremos que todas las actividades y lugares de la Iglesia sean siempre plenamente seguros para los menores, que se tomen todas las medidas posibles para que símiles crímenes no se repitan. Que la Iglesia vuelva a ser absolutamente creíble y de confianza en su misión de servicio y de educación para los pequeños, según las enseñanzas de Jesús, ha deseado durante el rezo de ángelus de este domingo.
Previamente, el Papa ha dictado en el discurso de cierre de la cumbre ocho directrices para erradicar esta lacra, entre las que se encuentran priorizar a las víctimas en todos los sentidos y realizar una seriedad impecable en la gestión de los casos, llevando a los culpables ante la Justicia.
Posteriormente, durante el ángelus y asomado al balcón de su estudio privado en la Biblioteca del Palacio Apostólico, el Papa ha reconocido que el problema de los abusos sexuales a menores por parte del clero ha suscitado desde hace tiempo un gran escándalo en la Iglesia y en la opinión pública porque ha causado dramáticos sufrimientos a las víctimas, pero también por la injustificable cobertura de los culpables por parte de los responsables eclesiásticos.
Es un problema difundido en todos los continentes, ha lamentado el Papa. Por ello, ha explicado que ha reunido en el Vaticano a 190 jerarcas de la Iglesia para debatir de modo corresponsable y colegial sobre cómo mejorar las estructuras para proteger a los menores.
Hemos escuchado la voz de las víctimas, hemos rezado y pedido perdón a Dios y a las personas ofendidas, hemos tomado conciencia de nuestras responsabilidades y del deber de hacer justicia en la verdad, de rechazar radicalmente toda forma de abuso y de poder, de conciencia y sexual, ha considerado.
De este modo, ante cientos de fieles reunidos en la plaza de San Pedro para escuchar su palabra, se ha comprometido a colaborar con eficacia junto a todas las personas de buena voluntad a nivel internacional para que se combata a fondo la gravísima plaga de la violencia ante centenares y centenares de menores de todo el mundo.