El Gobierno brasileño expresó este domingo su “condena más vehemente” contra los “actos de violencia” perpetrados “por el régimen ilegítimo del dictador Nicolás Maduro” en las fronteras de Venezuela con Brasil y Colombia.
El uso de la fuerza contra el pueblo venezolano, que ansía poder recibir la ayuda humanitaria internacional, caracteriza de forma definitiva el carácter criminal del régimen Maduro, señaló la Cancillería de Brasil en un comunicado. Para Brasil, esos incidentes violentos son un brutal atentado a los Derechos Humanos, que ningún principio de derecho internacional justifica remotamente y ante los cuales ninguna nación puede callarse.
El mandatario venezolano, Nicolás Maduro, impidió el sábado la entrada en el país de la ayuda humanitaria solicitada por el jefe del Parlamento de Venezuela, Juan Guaidó, quien se autoproclamó el 23 de enero pasado presidente de ese país y fue reconocido por unas 50 naciones, entre ellas Brasil y Estados Unidos.
En las líneas divisorias con Brasil y Colombia la fuerza pública de Venezuela hizo uso de la fuerza para impedir que grupos de venezolanos realizaran un cordón humanitario con objeto de facilitar la entrada de la ayuda cargada por camiones. En la frontera con Colombia se calcula que hubo al menos 285 heridos, mientras la oposición venezolana habla de 14 muertos y más de 20 heridos de bala en la localidad de Santa Elena de Uairén, en el estado Bolívar, limítrofe con Brasil.
La Cancillería brasileña hizo un llamado a la comunidad internacional, sobre todo a los países que aún no reconocieron a Guaidó, a sumarse al esfuerzo de liberación de Venezuela, reconociendo el Gobierno legítimo de éste y exigiendo que cese la violencia de las fuerzas del régimen contra su propia población.