El presidente chileno, Sebastián Piñera, dijo el martes que espera que la Iglesia católica supere los “tiempos oscuros” tras las crecientes denuncias de abusos sexuales cometidos por miembros del clero contra menores.
Al finalizar un acto litúrgico en la catedral católica de Santiago, el mandatario fue enfático en remarcar que la Iglesia “sabe mejor que nadie que se equivocó” en los casos de abusos y encubrimiento por parte de la cúpula eclesiástica.
“Espero que la Iglesia de nuestro país pueda no solamente enfrentar sino que también superar los tiempos oscuros que vivió cuando se cometieron tantos abusos sexuales contra nuestros niños y menores”, dijo Piñera a periodistas a la salida de la catedral.
En el tedeum ecuménico, en que participaron miembros de otras religiones y representantes de todos los poderes del Estado, la Iglesia católica hizo un leve mea culpa por los abusos cometidos.
“Estamos pasando por tiempos recios (...) Nuestra Iglesia de Chile vive un tiempo de purificación quizás como nunca antes en su historia”, dijo el monje benedictino Benito Rodríguez.
“Hablar desde esta precariedad, sin pretender negarla o esconderla es también nuestro aporte (...) intentando acoger con humildad y con generosidad nuestros errores, sin pretender privilegios o algún trato especial”, agregó.
La tradicional misa, en el marco de la celebración de las fiestas patrias chilenas, no fue presidida por el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, quien se abstuvo del acto en momentos que enfrenta una investigación como imputado en un caso de encubrimiento de delitos sexuales.
Las denuncias contra diversos miembros de la Iglesia católica chilena llevaron este año al Papa Francisco a abrir una investigación que ha generado la salida de obispos y otros sacerdotes acusados de realizar o encubrir abusos contra menores.
En una reciente asamblea de los obispos en Chile, el Episcopado reiteró su compromiso de colaborar con la justicia civil para que sean investigados decenas de casos en manos de la fiscalía.