El candidato presidencial Jair Bolsonaro dice que los policías de Brasil deberían estar autorizados para matar a delincuentes y recibir una condecoración por ello, no un juicio. En una entrevista, el aspirante derechista afirmó que él “dejaría a la gente de bien fuera de la línea de fuego” e iría decididamente tras los delincuentes.
”A ese tipo de gente (los criminales) no puede tratársele como si fuera un ser humano normal... No podemos permitir que los policías sigan muriendo a manos de esos tipos, declaró Bolsonaro en el principal programa noticioso nocturno de TV Globo.
Si un agente mata a 10, 15 o 20 con 10 o 30 balazos para cada uno hay que darle una medalla, no enjuiciarlo.
Bolsonaro está en el segundo lugar en las preferencias electorales según diversos sondeos de cara a las elecciones presidenciales de octubre, detrás del encarcelado ex presidente Lula da Silva. Sin embargo, las autoridades electorales posiblemente desautoricen la postulación de Lula debido a que fue declarado culpable de corrupción.
Bolsonaro tiene un historial de hacer declaraciones controvertidas. Ha defendido a la dictadura militar que gobernó Brasil de 1964 a 1985, y ha emitido declaraciones que sus detractores han calificado de homofóbicas y racistas. Algunos analistas políticos aseguran que muchos brasileños, hartos del delito sin control, simpatizan con el discurso de Bolsonaro de combate severo a la delincuencia, pero podría serle contraproducente.
Sus adversarios podrían aprovechar esa cita diciendo que matará a personas utilizando muchas balas. Está diciendo que se puede combatir la violencia con más violencia, y el brasileño medio no está de acuerdo con eso”, dijo Alberto Almeida, escritor de ciencias políticas.
Los grupos defensores de los derechos humanos afirman que la muerte de sospechosos a manos de policías ya es habitual en Brasil. A principios de mes, se afirmó en un informe que 63.880 personas -un récord- fueron asesinadas el año pasado en Brasil, el cual registra el mayor número de homicidios en el mundo y tiene una de las tasas más altas de asesinatos.