La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) opinó este jueves que la economía argentina terminará este año con una caída del 0,3%, frente al pronóstico que hizo en abril de un crecimiento del 2,5 %, fruto del desplome del peso de los últimos meses.
En su último Estudio Económico, la Cepal expuso que esa revisión a la baja se debe no solo a la contracción esperada en el consumo y la inversión, producto de la depreciación cambiaria, la política monetaria contractiva y la reducción del gasto primario proyectadas, sino también a una importante caída de las exportaciones primarias, por la fuerte sequía de la primera mitad del año.
El organismo cree que el préstamo acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) no será suficiente para las obligaciones de 2018 ni, especialmente, para las de 2019, aunque espera que el cumplimiento de unas metas fiscales más exigentes pactadas con el Fondo contribuya a restituir las necesidades de financiación del país y equilibrar la balanza de pagos.
Según avisó la Cepal, sus actuales proyecciones macroeconómicas están sujetas a que tenga lugar ese efecto catalizador del acuerdo con el FMI.
El informe expuso que el objetivo de déficit fiscal, que pasó para este año del 3,2% al 2,7%, se alcanzará principalmente con una reducción de gastos, aunque las licitaciones en infraestructura bajo el sistema de participación público-privada podría compensar parte de ese ajuste.
La Cepal indicó que las fuertes presiones cambiarias entre abril y junio estuvieron causadas por las tensiones financieras internacionales, los desequilibrios internos y cuestiones coyunturales como la implementación de un impuestos a la renta financiera de extranjeros y la sequía; y fueron favorecidas pro las medidas de desregulación del mercado.
Este episodio se saldó con una caída de las reservas del Banco Central de 13.100 millones de dólares, un 21,3 %, y un desplome de la moneda argentina del 36,5 % entre el 20 de abril y el 21 de junio, pese a que también se produjo un fuerte incremento de los tipos de interés.
Tras las dificultades financieras, el Gobierno argentino comenzó un programa de ventas diarias preanunciadas de dólares, lo que, junto al elevado nivel de tasas de interés y la emisión de deuda pública en el mercado local, contribuyó a la estabilización del tipo de cambio en julio, señaló la Cepal.