Un grupo de personas salió este miércoles a las calles de Managua, por decimoquinto día, para exigir justicia por las muertes durante los pasados enfrentamientos y la renuncia del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y de su esposa, la vicepresidenta, Rosario Murillo.
Los manifestantes se apostaron en la salida sur de Managua, en un rotonda que han ocupado como cementerio, enterrando cruces por cada uno de los asesinados y rindiéndoles honores con velas y flores.
“No era delincuentes, eran estudiantes” o “Que se rinda tu madre” gritaban las personas a los conductores que pasaban por el sitio quienes alzaban sus pulgares, las banderas de Nicaragua o sonaban las bocinas en señal de apoyo.
Asimismo, portaban carteles con leyendas de “Nicaragua te quiero libre” o “Los muertos no dialogan”, en alusión a un diálogo que protagonizará Ortega junto con la cúpula empresarial del país y el episcopado, estos últimos, como mediadores.
El Movimiento Estudiantil 19 de Abril, formado por universitarios que protestan contra el Gobierno de Daniel Ortega, no han parado de manifestarse en las calles desde el 18 de abril pasado y en este miércoles convocaron a “una marcha nacional” para el próximo 9 de mayo.
Nicaragua atraviesa una crisis que ya cumple quince días, debido a multitudinarias manifestaciones en contra del presidente Ortega, que iniciaron por reclamos a unas medidas de seguridad social y continuaron a pesar de que el mandatario revocó su decisión, debido a las múltiples muertes causadas por la represión.
La cifra de muertos durante las protestas contra el Ejecutivo, que tuvieron sus episodios más violentos entre el 18 y el 22 de abril pasado, se elevó hoy hasta las 43 víctimas, según informó el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
Nicaragua vive pendiente del comienzo del diálogo que protagonizarán el Gobierno y el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) , con la Conferencia Episcopal (CEN) como mediadora, aunque todavía no se ha establecido una fecha para su celebración.