Jamaica declaró estado de emergencia en la segunda ciudad del país, Montego Bay, para combatir una ola de asesinatos. Las autoridades han pedido a los turistas no salir de los hoteles después de que el primer ministro, Andrew Holness, activara la medida.
Como consecuencia, han sido desplegados miles de soldados y policías en la ciudad, donde viven 200.000 personas y que acoge a algunos de los resorts más lujosos de la isla.
La tasa de asesinatos de Montego Bay ha aumentado en los últimos años, pero en 2017 alcanzó el récord de 335, la mayoría relacionados a la violencia de las pandillas.
Hemos alcanzado un punto en el que estamos preparados para tomar estas firmes medidas para asegurar que la criminalidad no desestabiliza el prometedor futuro de Jamaica, declaró Holness.
Amnistía Internacional criticó en el pasado a las autoridades jamaicanas por ejecuciones extrajudiciales cometidas por la policía y su actitud de intimidación hacia las familias de las víctimas.