Funcionarios encargados de revisar la enorme cartera de China en moneda extranjera recomendaron desacelerar o detener las compras de bonos del Tesoro estadounidense debido a que el mercado sería cada vez menos atractivo y por las tensiones comerciales con Washington, según Bloomberg.
El reporte ayudó a impulsar los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a máximos de 10 meses de 2,59%, si bien luego se estabilizaron para quedar casi sin cambios en 2,55% gracias a una exitosa subasta de títulos del Gobierno. El mercado está atento ante la posibilidad de que la tasa pueda volver a su máximo de 2017 de 2,63%, disparando ventas masivas.
Economistas advirtieron que hay límites a los cambios que Beijing puede hacer a la composición de sus reservas, porque necesita controlar el tipo de cambio de su moneda.
El reporte de Bloomberg sostuvo que el mercado de bonos del Tesoro es menos atractivo respecto de otros activos. También citó las tensiones comerciales con Estados Unidos como una razón para desacelerar las compras del Tesoro, añadió el reporte.
China tiene la mayor reserva mundial de divisas, aproximadamente 3 billones de dólares, y es el mayor inversor extranjero de deuda del gobierno de Estados Unidos, con 1,19 billones de dólares en bonos del Tesoro a octubre de 2017, según datos del Departamento del Tesoro.
El subsecretario del Tesoro, David Malpass, minimizó cualquier preocupación por la demanda china por bonos del Tesoro en una conversación con periodistas en Bruselas.
El mercado de bonos de Estados Unidos es un mercado profundo y sólido en el mundo, por lo que confiamos en que nuestra economía, con el fortalecimiento de la economía, seguirá siendo un mercado profundo y sólido, dijo Malpass.
Empero hay creciente nerviosismo por la debilidad de la deuda del gobierno norteamericano luego que el Banco de Japón dijo esta semana que reduciría sus compras de bonos, generando especulación que reducirá su estímulo monetario este año.
A los inversores les preocupa además que las empresas pudieran reducir sus tenencias de deuda si comienzan a repatriar fondos desde el exterior tras la aprobación del proyecto de reforma tributaria impulsada por la presidencia de Trump.