El Fondo Monetario Internacional elevó las previsiones de crecimiento de Argentina de 2,2% a 2,4% para este año respecto de lo estimado hace tres meses, en la actualización de los pronósticos económicos para la región de su informe de Perspectivas Económicas Globales difundido en abril pasado.
FMI subió las previsiones de crecimiento para la Argentina y, en cambio, redujo las perspectivas de crecimiento económico de Perú (de 3,5% a 2,7%); Colombia (de 2,3% a 2%); Chile (de 1,7 % a 1,6 %) y Venezuela (de -7,4 % a -12 %).
En Argentina, la recuperación tras la recesión del año pasado está consolidándose, gracias al estímulo que el consumo privado recibe del repunte gradual del salario real, y la inversión está respaldada por el crecimiento incipiente del crédito y el aumento del gasto en obra pública, indicó Alejandro Werner, director del Hemisferio Occidental del FMI en el blog de la entidad.
Werner destacó, además, que la depreciación reciente del peso ayudó a corregir la sobrevaloración de la moneda y, junto al repunte de la demanda de Brasil, podría impulsar el crecimiento de las exportaciones argentinas.
El caso más extremo es el de Venezuela, que ve agudizada su crisis económica con un contracción del 12 % para este año frente al -7,4 % anticipado en abril, marcada por las disminuciones proyectadas en la producción y la importación de petróleo, además de la mayor incertidumbre relacionada con la crisis política reinante.