El jefe del gabinete ministerial de Brasil, Eliseu Padilha, de 71 años, es uno de los principales dirigentes del Partido del Movimiento de la Democracia Brasileña (PMDB), y está envuelto en la más reciente crisis del gobierno del presidente Michel Temer, a raíz de que ha sido vinculado con la recaudación ilegal de dinero o sobornos para campañas políticas, al menos tres de los 77 ejecutivos delatores y corruptores confesos de Odebrecht.
Marcelo Odebrecht, heredero del imperio Odebrecht condenado a 19 años de cárcel, acusó a Padilha de haberse encargado, durante una cena en la cual participó Temer en 2014, de acordar una donación de 3 millones de dólares al PMDB.
El ex asesor presidencial y mejor amigo de Temer, José Yunes, dijo que fue usado como mula por Padilha debido a que supuestamente su oficina fue usada para llevar y traer dinero de Odebrecht destinado al PMDB.
La prensa brasileña informó que políticos del PMDB y del aliado Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) son los más comprometidos en la delación de Odebrecht que está en poder y bajo secreto sumarial del fiscal general, Rodrigo Janot.
Ante el Tribunal Superior Electoral, que investiga los fondos de campaña de la fórmula vencedora en 2015, Dilma Rousseff-Michel Temer, este lunes tenían previsto declarar dos ejecutivos de Odebrecht, entre ellos Claudio Melo Filho, quien dice haber negociado directamente con Temer el envío de dinero.
El gabinete de Temer, por el caso de Padilha, está en suspenso y se completará a partir del martes con la asunción del senador Aloysio Nunes como nuevo canciller, del PSDB e investigado en la Operación Lava Jato porque un empresario de la construcción lo acusó de recibir unos 30.000 dólares en forma ilegal para una campaña electoral.
Nunes reemplaza al renunciante José Serra, que está citado en la delación de Odebrecht de recibir dinero en Suiza en cuentas de terceros para su campaña presidencial en 2010. En caso de que el tribunal electoral encuentre vinculaciones de corrupción con la recaudación de campaña, Temer podrá ser destituido del cargo.
El presidente del Tribunal Superior Electoral, Gilmar Mendes, también integrante de la Suprema Corte, identificado con el PSDB, afirmó este lunes durante un evento en San Pablo que el país vive en un estado de descalabro.