Los países de la Alianza del Pacífico -Colombia, Chile, Perú y México- son conscientes de que les separan miles de kilómetros de los turistas chinos a los que quieren atraer y este viernes comenzaron una gira por el país asiático para tratar de acortar distancias.
Por eso Beijing fue punto de salida de cuatro eventos que las naciones de la Alianza llevarán a cabo este mes, desde la capital hasta la metrópolis de Shanghái, la sureña urbe de Cantón y la isla de Hong Kong.
Estamos aquí para presentar nuestros destinos, en un esfuerzo que tiene que ser sistemático, permanente, multidimensional; para ir generando una sensibilidad más amplia entre la opinión pública china sobre nuestra región como destino, explicó el embajador de México en China, Julián Ventura, en el acto celebrado en la capital.
Y es que las naciones de la Alianza no sólo combaten los kilómetros, también el desconocimiento sobre sus países que, no obstante, se va reduciendo.
México, por ejemplo, lleva cuatro años incrementando el número de visitas de turistas chinos a porcentajes de doble dígito y en 2015, el aumento fue de casi el 30% tras llegar a las casi 100.000 visitas.
De lejos se encuentran Perú, con 20.000 en 2015, y Colombia, con 11.600 visitantes el año pasado.
Parece que nuestros países están lejos, pero estamos más cerca que nunca, dijo Juan López, gerente para Norteamérica y Asia Pacífico de Turismo Chile -país que ahora ostenta la presidencia de la Alianza-, antes de presentar las opciones aéreas para llegar desde China hasta los países que forman esta agrupación.
De momento, sólo México cuenta con una conexión directa, que liga el país con Shanghai tres veces por semana, mientras que para llegar al resto de naciones los chinos tienen que pasar por vuelos de larga duración y una o varias conexiones.
Es difícil encontrar buenos vuelos, pero sinceramente lo más difícil es que los chinos encuentren vacaciones, comentó Jenny Liu, responsable del Departamento de América de la operadora 6ren your Trip.
Según señalaba Liu, la mayoría de ciudadanos suele tener unos diez días de vacaciones, por lo que resulta complicado con ese límite de días trasladarse hasta Latinoamérica, donde no viajan para visitar sólo un país, sino tres o cuatro a ser posible.
En base a los datos de su operadora, la edad media de los turistas chinos que optan por vacaciones en América del Sur está por encima de los 30 o 35 años: Los jóvenes no tienen ni tiempo ni dinero, destaca.
”Si tienen dinero y tiempo -añade- a los chinos sí les gusta viajar a Latinoamérica, ver paisajes como Machu Picchu. Europa o América del Norte es lo de siempre.