El 5 de junio 22 millones de peruanos votan por presidente, y a dos semanas del balotaje, se quebró un empate técnico que llevaba 40 días: según Ipsos Perú, un 52,6% votaría por la candidata Keiko Fujimori, líder de Fuerza Popular, y un 47,4% por Pedro Pablo Kuczynski, dirigente de Peruanos por el Kambio (PPK).
Ambos se confrontaron la noche del domingo en el primero de dos debates presidenciales: mientras el político destacó los riesgos de la corrupción de un nuevo gobierno fujimorista, la hija del ex presidente señaló que su contendor defenderá los intereses de los grandes empresarios.
Fujimori estuvo a la ofensiva en el evento realizado en Piura, el primer debate presidencial realizado fuera de Lima en la historia del país, una sede pedida por la candidata, pues allí logró una de las mayores votaciones en la primera vuelta del 10 de abril.
La presidenta de Fuerza Popular leyó casi todas sus intervenciones y criticó a su contendor tres veces por haber estado ocho días de la campaña en Estados Unidos y usó un argumento falso para cuestionar al candidato a la primera vicepresidencia de PPK, por un supuesto proceso judicial por tierras en Puno, que en realidad es un conflicto limítrofe entre dos departamentos.
“Nuestro plan de gobierno nace de recorrer el Perú, pero el suyo nace para defender los intereses de los grandes empresarios, es elitista y defiende la gran corporación internacional”, comentó Fujimori. E|l ex banquero y ex ministro de Economía planteó las propuestas de su equipo, pero también atacó a su oponente debido a la revelación, del domingo pasado, de que el secretario general de Fuerza Popular, el congresista Joaquín Ramírez, es investigado por lavado por la agencia antidrogas de los Estados Unidos, la DEA. El candidato mostró un documento en el que Ramírez aún tiene un poder para actuar a nombre del partido, pese a haber tomado una licencia el jueves mientras duren las investigaciones fiscales en Perú y las de la DEA.
“Tenemos que tener fuerza para dar servicios básicos en todos los pueblos del Perú, por eso hay un voto de protesta tan grande. (Lo haremos) con el programa ‘Nuestras ciudades’ donde los funcionarios eficientes, y no corruptos, van a hacer el trabajo. ¿Por qué no hablamos de los 6.000 millones de dólares que se robaron en el gobierno de su padre con el que se podrían haber construido hospitales?”, preguntó Kuczynski.
De acuerdo al sondeo de Ipsos Perú, conocido minutos antes del inicio del debate presidencial, un 12,3% de consultados votaría blanco o anulado. Pese a que las propuestas al problema de inseguridad ciudadana serán abordadas en el debate presidencial del próximo domingo 29, Fujimori usó el segmento sobre ‘competitividad regional’ para reiterar sus propuestas en este campo. “No me temblará la mano para recuperar las calles, tengo la decisión política para poner orden en el país y no me temblará la mano para declarar el estado de emergencia”, afirmó.
El líder de PPK aludió varias veces a la amenaza de no tener instituciones transparentes en un eventual gobierno fujimorista, y su oponente respondió un par de veces con agresividad: “la candidata soy yo, no mi padre”.