El senador Paulo Bauer, uno de los líderes del Partido de la Socialdemocracia Brasileña (principal opositor), manifestó su oposición a que el Mercosur se reúna para analizar el eventual juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff. El presidente de Uruguay Tabaré Vázquez había promovido una declaración en apoyo a Rousseff.
Eso no es necesario porque en Brasil todo se está realizando dentro de lo que establece la Constitución”, declaró el legislador socialdemócrata. “Para nosotros, llamar a un reunión sería algo bastante inapropiado, sería una forma de injerencia en los asuntos internos de Brasil”, reforzó.
Bauer recordó lo sucedido en 2010 cuando el ex/presidente del Paraguay Fernando Lugo dejó el Gobierno luego de un proceso similar, por lo que luego el país fue suspendido del Mercosur, hasta las elecciones siguientes.
Las acciones contra el Paraguay fueron muy criticadas, por su arbitrariedad, confesada por el propio presidente uruguayo de ese entonces, José Mujica quien en ese entonces manifestó que a veces lo político se impone a lo jurídico”
“Esa decisión fue tomada por los presidentes Dilma Rousseff, Cristina Fernández y Nicolás Maduro, fue un grave error”, ponderó Bauer.
Por su parte la ex candidata presidencial brasileña Marina Silva pidió a la Justicia Electoral acelerar el examen del presunto financiamiento ilegal de la reelección de Dilma Rousseff en 2014, que de probarse anticiparían nuevos comicios.
Silva, tercera en los comicios de 2014 con 21,3% de los votos, considera esa solución preferible a la del “impeachment” (juicio político) que estudia el Congreso.
“Si se comprueba que el dinero de la corrupción alteró la voluntad soberana de la sociedad brasileña en las elecciones, la salida, el camino, es una nueva elección”, dijo Silva.