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Disparen sobre la prensa: 67 periodistas muertos en 2015, según RSF

Martes, 5 de enero de 2016 - 01:34 UTC
La mayoría de los muertos eran periodistas locales (97%), fuera de zonas de conflicto (64%); en 2014, la mayoría (66) fueron en zonas de guerra. La mayoría de los muertos eran periodistas locales (97%), fuera de zonas de conflicto (64%); en 2014, la mayoría (66) fueron en zonas de guerra.

Durante el año que concluyó, 67 periodistas fueron muertos oficialmente en circunstancias vinculadas a su trabajo, de una lista de 110 profesionales de la información fallecidos en extrañas circunstancias, según el recuento anual que publicó Reporteros sin Fronteras (RSF).

 A esa cifra se suman 27 periodistas-ciudadanos y otros 7 colaboradores de los medios de comunicación, lo que eleva a 787 los fallecidos en la última década por trabajar para los medios de comunicación, señaló RSF.

La mayoría de los fallecidos en 2015 eran periodistas locales (97%) que trabajaban fuera de zonas de conflicto (64%), al contrario que en 2014, cuando la mayoría de los 66 periodistas asesinados lo fueron en zonas de guerra.

El mayor cementerio de periodistas del mundo en el año que termina fue Irak (con 9 confirmados de 11 posibles), seguido de Siria (9 de 10), países ambos con conflictos armados y con la presencia de la organización terrorista Estado Islámico (EI).

Particularmente peligroso resulta para la prensa tanto la ciudad iraquí Mosul, bajo el imperio del EI, como Alepo, en Siria, donde reina el fuego cruzado entre las fuerzas de Damasco y grupos rebeldes o terroristas.

En tercer lugar del ranking llega Francia (8/8), que tristemente protagonizó el ataque terrorista contra la prensa más sonado del año, cuando el 7 de enero de 2015 dos yihadistas asesinaron a doce personas en la sede de la revista satírica Charlie Hebdo.

Le siguen en la lista Yemen (6/8), Sudán del Sur (6/7), India (5/9) y México (3/8), el país más mortífero para la prensa en América Latina, donde en Estados como Oaxaca o Veracruz los periodistas están en el objetivo de “mafias y de personalidades políticas locales cuando denuncian la corrupción”, indicó RSF.

Uno de los asesinatos de periodistas que marcaron 2015 en ese país recuerda RSF- es la ejecución del foto-reportero mexicano Ruben Espinosa, encontrado con signos de tortura junto a cuatro mujeres en un apartamento de la ciudad de México, adonde había huido desde Veracruz por amenazas de muerte.

Cierra esta lista negra Filipinas, donde se ha establecido la muerte de 3 periodistas por motivos laborales sobre 7 casos, y Honduras, con 7 casos posibles pero ninguno confirmado.

En esta línea, el informe del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), que se hace público también en la oportunidad, destaca que de los 69 asesinados registrados este año a fecha del 23 de diciembre, un tercio lo fueron por grupos criminales, como narcotraficantes o incluso funcionarios gubernamentales relacionados con el crimen organizado y la corrupción.

Entre ellos, el CPJ destaca el asesinato del locutor radiofónico brasileño Gleydon Carvalho, muerto a tiros mientras dirigía su programa de radio, muy crítico con los policías locales y los políticos brasileños, a los que acusó repetidas veces de prácticas corruptas. Sólo en Brasil este año murieron seis informadores, la cifra más elevada en el país sudamericano desde que el CPJ empezó a realizar este informe anual en 1992.

“Es imperativo dotarse de un mecanismo concreto para la aplicación del derecho internacional sobre la protección de los periodistas”, declaró el secretario general de Reporteros Sin Fronteras, Christophe Deloire.

RSF destacó una doble amenaza para la prensa: “grupos no estatales que perpetran exacciones”, pero también “muchos Estados que no respetan sus obligaciones internacionales”. Por eso considera imperativo que las Naciones Unidas designen a un “representante especial” para la protección de los periodistas.

La organización también recordó que dos de los reporteros asesinados este año eran mujeres: la francesa Elsa Cayat, en el ataque islamista contra “Charlie Hebdo” el 7 de enero; y la somalí Hindia Mohamed, con un coche bomba por la milicia islamista de Somalia Shebab el 3 de diciembre.

A los fallecidos enumerados hay que añadir 54 periodistas secuestrados lo que supone un aumento del 34% respecto a 2014; y 153 encarcelados, un descenso del 14%. De todos ellos RSF dio cuenta en otro informe presentado hace dos semanas.

Los rehenes se encuentran en Siria (26), Yemen (13), Irak (10) y Libia (5); y los encarcelados en China (23), Egipto (22), Irán (18), Turquía (9) y otros 66 repartidos por el resto del mundo.

Categorías: Política, Internacional.