Estados Unidos y Cuba anunciarán este miércoles que han llegado a un acuerdo para restablecer sus relaciones diplomáticas y abrir embajadas en sus respectivas capitales, después de más de seis meses de negociaciones, adelantaron hoy fuentes de la Casa Blanca.
El jefe de la Sección de Intereses de EE.UU. en La Habana, Jeffrey DeLaurentis entregará el miércoles en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba una carta del presidente Barack Obama dirigida a su homólogo Raúl Castro sobre el restablecimiento de relaciones diplomáticas y apertura de embajadas.
Según informó la Cancillería cubana, el ministro interino de Relaciones Exteriores, Marcelino Medina, recibirá en la mañana del miércoles a DeLaurentis “quien será portador de una misiva” de Obama a Raúl Castro “sobre el restablecimiento de relaciones diplomáticas y la apertura de embajadas en los respectivos países”.
El presidente Barack Obama y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry hablarán sobre el anuncio “mañana por la mañana”, según dijo a periodistas un funcionario de la Casa Blanca, que pidió el anonimato.
“Anunciaremos formalmente mañana que Estados Unidos y Cuba han llegado a un acuerdo para restablecer sus relaciones diplomáticas formales y abrir embajadas en las respectivas capitales”, señaló el funcionario.
El anuncio se producirá más de seis meses después de que Obama y el presidente de Cuba, Raúl Castro, sorprendieran al mundo con su histórico anuncio, el pasado 17 de diciembre, de que iniciarían un proceso para restablecer las relaciones diplomáticas, rotas en 1961.
Desde entonces, ha habido cuatro rondas formales de negociación, dos en La Habana y dos en Washington, para concretar la apertura de las embajadas en las respectivas capitales, que se erigirán en los edificios que ahora ocupan las secciones de intereses de ambos países.
La apertura de embajadas cerrará la fase del restablecimiento de las relaciones diplomáticas, pero no la total normalización, ya que para eso es necesario, según La Habana, el levantamiento del embargo económico impuesto a la isla en 1962 y la devolución de los terrenos que ocupa la Base Naval de Guantánamo, temas difíciles de resolver.
La última ronda de negociación, celebrada en mayo en Washington, culminó con el mensaje de que la apertura de las sedes diplomáticas estaba cerca, una idea que se reforzó el día 29 de ese mes, cuando se oficializó la salida de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo que elabora el Departamento de Estado de EE.UU.