La OCDE rebajó sus perspectivas de crecimiento económico para Colombia al 3,3% en 2015 y el 3,7% en 2016, por una reducción de la inversión y las exportaciones generada en la baja de los precios de los productos básicos y a una desaceleración del gasto público por un descenso de los ingresos mineros.
En su informe de perspectivas del pasado noviembre, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, (OCDE) había apuntado que la subida del PIB sería este año del 4,4% y del 4,7% el siguiente. En ese anterior estudio, esas cifras sobre la proyección del PIB habían sido, con diferencia, mejores que las de los 34 miembros actuales de OCDE, en la que el país está en proceso de adhesión.
Los autores de esta nueva evaluación recalcaron que el crecimiento se va a reducir por el gradual reequilibrio de la inversión y el empleo más allá de los productos básicos, lo que rebajará el dominio de las exportaciones mineras y petroleras, que suponen actualmente el 70% de las ventas al extranjero.
El organismo previó que la inversión gane cierto impulso hacia el segundo semestre de 2016 y sostuvo que el actual déficit de la balanza por cuenta corriente se ampliará este año pero se reducirá gradualmente a medida que mejore la competitividad.
La OCDE estimó que la política fiscal debería mantenerse neutral para mantener controladas las expectativas de inflación, y consideró que la consolidación debería continuar, si bien a largo plazo se necesitarán mayores ingresos fiscales para financiar los necesarios gastos sociales e inversiones en infraestructuras.
El informe recomendó también la puesta en marcha de reformas estructurales para que el crecimiento sea más inclusivo y se facilite el mencionado proceso de ajuste económico, y destacó que una buena ejecución del programa de infraestructuras de transporte será clave para dicho reequilibrio.