La subsecretaria de Estado de Estados Unidos para Latinoamérica, Roberta Jacobson, informó a CNN en español que Estados Unidos no derogará el decreto en el que se establecen sanciones contra funcionarios del gobierno venezolano.
En entrevista con la periodista Patricia Janiot, Jacobson aseguró que el lenguaje del decreto no va a cambiar. Resaltó además que las sanciones son aplicadas sobre siete personas, no contra el pueblo venezolano.
La funcionaria aclaró que el peligro contra Estados Unidos no es Venezuela sino los siete funcionarios sancionados, quienes representan una amenaza contra la Casa Blanca a través, por ejemplo, del sistema financiero.
La subsecretaria de Estado reconoció que aunque la palabra amenaza no fue bien vista por los presidentes latinoamericanos reunidos en la Cumbre de las Américas en Panamá, la orden ejecutiva no implica que la administración de Obama pretenda cambiar al gobierno venezolano y que Estados Unidos no quiere invadir Venezuela.
Explicó que el decreto implementado es una ley con ese lenguaje, utilizado cuando se aplican sanciones. Eso ya está implementado. Significa solamente una orden sobre siete personas, no en contra del pueblo venezolano, creo que ya está en práctica y no vamos a cambiarlo, afirmó Jacobson
Por su parte el presidente venezolano Nicolás Maduro reveló que con el resultado de la Cumbre, durante los próximos días pudiera abrirse la posibilidad de ir a un proceso de conversaciones con el gobierno estadounidense y explorar el camino de relaciones de respeto, que es lo fundamental.
Sin embargo, el líder del régimen chavista consideró que para ello es necesario despejar toda la oscuridad que se ha montado por allí alrededor de ese decreto, que durante la Cumbre ha sido rechazado con vehemencia en inglés, francés, portugués y español.
Maduro comentó además el breve encuentro que mantuvo con su colega estadounidense Barack Obama. Hemos tenido un encuentro breve, de unos 10 minutos. Quizás más adelante informaré sobre qué conversamos, pero ha sido un encuentro serio, franco, nos dijimos las verdades, y yo diría que inclusive cordial, señaló el jefe de Estado del país caribeño.
El titular del Palacio de Miraflores añadió: Nos dimos la mano, yo dije, tiendo mi mano, iba con mi mano y de pronto vi la mano de él y se la tomé. Con afecto, como somos nosotros. Le dije, presidente Obama, yo no soy enemigo de los Estados Unidos ni mi pueblo es enemigo de los Estados Unidos, ni nuestro comandante Chávez jamás fue enemigo de los Estados Unidos.
A su vez Bernadette Meehan, vocero del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, dijo que Obama indicó nuestro firme apoyo a un diálogo pacífico entre las partes dentro de Venezuela. Y reiteró que nuestro interés no es amenazar a Venezuela, sino apoyar la democracia.