El ministro chileno del Interior, Rodrigo Peñailillo quiso desligar a la presidenta Michelle Bachelet de la polémica por el millonario crédito bancario que obtuvo su nuera en 2013 y aseguró que el Gobierno ha actuado con “total transparencia”.
“La presidenta está dedicada a gobernar y los intereses del país, ella no tiene nada que ver con eso”, dijo Peñailillo en declaraciones a la prensa.
El ministro rechazó las acusaciones de la oposición sobre un supuesto tráfico de influencias en la obtención del crédito de 6.500 millones de pesos (unos 10,3 millones de dólares) y consideró que la operación es un tema “privado entre privados” que además ocurrió antes que Bachelet asumiera su segundo mandato.
El caso se conoció el viernes pasado en un reportaje de la revista Qué Pasa, que reveló que el Banco de Chile le entregó en 2013 un crédito de 6.500 millones de pesos a la empresa de Natalia Compagnon, esposa de Sebastián Dávalos, el hijo de la mandataria chilena, para comprar unos terrenos en la región de O’Higgins.
El préstamo se aprobó un día después de que Bachelet ganara la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, el 15 de diciembre de 2013, cuando Dávalos trabajaba como gerente de proyectos de Caval, la compañía que recibió el dinero.
Los cuestionamientos en torno a la operación aumentaron este lunes al saberse que en diciembre de 2013 se produjo una reunión para hablar del préstamo entre Andrónico Luksic, vicepresidente de la entidad, y Compagnon, a la que también asistió Dávalos, que actualmente es director del área sociocultural de la Presidencia.
Por su parte el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, compareció este lunes ante los medios de comunicación para hablar del polémico crédito y afirmó que la operación fue regular y se circunscribió al ámbito privado.
Pese a esto, el ministro de Hacienda en funciones, Alejandro Micco, reconoció en una entrevista radiofónica que “no todo el mundo tiene acceso” al vicepresidente de un banco para negociar un crédito, como sucedió con Dávalos y Compagnon.
La revista que destapó el caso aseguró que la nuera de la mandataria adquirió los terrenos porque estaba previsto que se modificara el plan regulador de la zona y estos aumentaran de valor, lo que todavía no ha sucedido.
Aún así, la empresa de la nuera de Bachelet pactó en enero pasado la venta de las 44 hectáreas de terreno en Machalí, en la región de O’Higgins, por 9.500 millones de pesos (unos 15,1 millones de dólares).