La diputada argentina Laura Alonso declaró este viernes ante la Justicia que el fiscal Alberto Nisman, fallecido en extrañas circunstancias en enero, creía que lo iban a desplazar de la investigación del atentado a la mutualista judía AMIA. Asimismo confesó a la diputada tener miedo por sus hijas.
Alonso realizó su declaración ante la fiscal Viviana Fein que está a cargo de la investigación por el fallecimiento de Nisman, quien murió de un tiro en la cabeza en su vivienda, el pasado 18 de enero, cuatro días después de denunciar a la presidenta argentina por presunto encubrimiento de los sospechosos iraníes del atentado a la AMIA, perpetrado en 1994.
Alonso aportó a Fein el contenido de los mensajes por móvil que intercambió con Nisman el jueves y el viernes previos a su muerte. En ellos, el fiscal le dijo a Alonso que el lunes 19 iría con todo a detallar en el Congreso ante los parlamentarios su denuncia contra la presidenta argentina.
Estaba entusiasmado y preparándose, dijo la diputada al hablar con la prensa al concluir su comparecencia voluntaria ante Fein. Pero según Alonso, Nisman le dijo: No tengo miedo por mí, tengo miedo por mis hijas, pero el fiscal no le dio mayores datos sobre este punto.
La parlamentaria detalló que la primera vez que Nisman le contactó por mensaje de móvil fue el 6 de enero, desde Londres, donde estaba con una de sus hijas de vacaciones.
Posteriormente, lo vio personalmente el 14 de enero, luego de que Nisman presentara la denuncia contra Cristina Fernández por presunto encubrimiento a los iraníes acusados en la causa AMIA a través de la firma de un acuerdo con el Gobierno iraní, suscrito en 2013.
En persona, sus últimas palabras fueron 'quiero que conozcan la denuncia y me ayuden a difundir esto'. A mí en privado me dijo 'Cristina Kirchner ordenó todo', declaró Alonso, en alusión a que Nisman estaba convencido de que Fernández habría ordenado acordar con Irán para proteger a los acusados por el atentado.
Según relató la diputada, Nisman le dijo que la procuradora general, Alejandra Gils Carbó (jefa de los fiscales), estaba dispuesta a apartarle del caso AMIA porque el Gobierno se había enterado de que el fiscal estaba investigando el presunto encubrimiento.
Me dijo 'la procuradora en diciembre me contactó porque se habían elevado las amenazas en mi contra y me proponía que yo tuviera más custodia, a lo que le dije que no'. También él me dijo 'van a apartarme de la Fiscalía, la procuradora tiene decidido apartarme porque el Gobierno sabe que yo estaba llevando esta investigación', dijo Alonso.
La diputada afirmó no tener la menor duda de que Alberto Nisman no se suicidó y sostuvo que el clima de violencia verbal que se generó por los voceros oficialistas desde el jueves hasta la aparición sin vida de Nisman buscaba amordazar al fiscal y callarlo y que finalmente lo terminaron callando porque él perdió su vida.
Yo sólo sé que ha muerto un fiscal de la democracia, en democracia, un día antes de presentarse ante el Congreso y cuatro días después de haber denunciado a la presidenta por encubrimiento, señaló la legisladora.