Varios fondos especulativos, entre ellos Elliott, de Paul Singer, BlackRock y Oz Management, son accionistas de varias de las empresas que exploran en busca de petróleo y gas en aguas de las Falklands/Malvinas denunció este domingo el diario Tiempo Argentino que es financiado por el gobierno de Cristina Fernández.
Según dicha crónica la firma multinacional Noble Energy, compañía de capitales estadounidenses con base en Houston, es una de las ocho petroleras que explora 'ilegalmente' la zona del archipiélago argentino con respaldo financiero de 'fondos buitre', que tienen acciones de la empresa.
El fondo Elliott Management Corporation, que encabeza el litigio de Argentina con los holdouts, posee acciones de Noble Energy, al igual que el Bank of New York Mellon (BoNY), entidad que es el agente fiduciario de Argentina y no liberó el dinero para pagarles a los bonistas que entraron a los canjes de la Argentina, justamente por cumplir con una sentencia del juez de Nueva York, Thomas Griesa.
Según Tiempo Argentino, Noble Energy, la firma que intensificó trabajos de exploración en aguas de las Falklands/Malvinas, no sólo tiene entre sus accionistas a Elliott Management, sino también a Oz Management, otra empresa del multimillonario Paul Singer.
También aparece el fondo BlackRock, objeto de transferencia de acciones con el fondo Elliott, y propietario de parte de la gráfica Donnelley, una de cuyas plantas está radicada en Argentina y es investigada por el gobierno de la presidenta Cristian Fernández por una presunta quiebra fraudulenta.
Entre otros antecedentes que ligan a Paul Singer con el petróleo y las Falklands/Malvinas, Tiempo Argentino señala que Elliott Management posee cerca de un 40% de la petrolera Hess Corp, que fue socia de la Repsol que controlaba YPF en emprendimientos en otros países de la región, como México y Brasil.
De hecho, en 2009, se denunció públicamente un intento de Repsol de entregar sin licitación a Hess un área de Vaca Muerta. Asimismo, Singer a través de Noble Energy también perfora en el Golfo de México desde 2011, de la mano de Repsol, consigna el informe.
Por otra parte en 1998, Hess Corp fue la primera empresa que recibió contratos otorgados por el gobierno de las Islas Falklands/Malvinas para la exploración de hidrocarburos.
En 2012, el gobierno argentino emitió la Resolución 133 a través de la cual sancionó a empresas que operaban ilegalmente en Malvinas. El apercibimiento se extendería por un plazo de 20 años, al ser empresas que nunca obtuvieron habilitación para trabajar en la zona del archipiélago (violaban las disposiciones de la Ley 17.319 en materia de exploración y explotación de recursos naturales).
En el caso de otras compañías embarcadas en la exploración de hidrocarburos 'ilegal' en el Mar Argentino, como Desire Petroleum, Falkland Oil and Gas y en Borders and Southern Petroleum, también aparece el fondo BlackRock como accionista.
Según Tiempo Argentino, BlackRock está dentro del paquete del 'fondo buitre' Gramercy, que según denunciaran por entonces diputados de la oposición argentina ante la justicia, especuló y se quedó con bonos que quedaron fuera del primer canje de deuda argentina de 2005.
El artículo del matutino gubernamental destaca que el control de los fondos que especularon con deudas de países en crisis en las petroleras de las Falklands/Malvinas, son prueba de la injerencia de los fondos buitre en el poder económico global, en distintos sectores estratégicos, condicionando políticamente a las naciones, incluso al propio Estados Unidos.
Por otra parte, Tiempo Argentino resalta que la exploración de las empresas inglesas y norteamericanas en Malvinas viola las resoluciones de la ONU que reclaman mantener el statu quo en el archipiélago hasta tanto se dirima el litigio por la soberanía de las islas del Atlántico sur.