La Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya suspendió el jueves el proceso de demanda marítima presentado por Bolivia para resolver el recurso de incompetencia que ha presentado el Gobierno chileno. En este contexto, ha dado de plazo hasta el 14 de noviembre al Ejecutivo de Evo Morales para responder a esta impugnación.
Chile decidió el pasado 15 de julio impugnar la competencia de la CIJ para resolver este conflicto limítrofe, argumentando la defensa inclaudicable de la integridad territorial de ese país y los intereses nacionales, tal y como explica la Agencia Boliviana de Información (ABI).
El conflicto territorial se remonta a 1879, cuando Bolivia perdió su salida al Pacífico en la guerra que mantuvo con Chile, que culminó con el Tratado de Paz y Amistad de 1904, sobre el derecho de libre tránsito de mercancías bolivianas hacia y desde puertos en este océano.
Chile asegura que con el acuerdo de paz --que fue ratificado por los parlamentos de ambos países veinte años después-- se establecen las fronteras --también las marítimas-- de las naciones combatientes, por lo que no hay lugar a ninguna disputa territorial.
Bolivia argumenta que el acuerdo de paz es injusto, incumplido e impuesto y ha rechazado la intangibilidad de los tratados internacionales, recordando que Estados Unidos se avino a superar el firmado en 1903 con Panamá.
En un intento de destrabar el conflicto bilateral, el Gobierno de Evo Morales y el de la entonces presidenta chilena firmaron en 2006 una agenda de 13 puntos para iniciar las negociaciones sobre la salida marítima para Bolivia.
No obstante, el diálogo nunca llegó a iniciarse, más allá de reuniones de trabajo, por lo que finalmente el 24 de abril de 2013 el Gobierno boliviano presentó una demanda en la CIJ para exigir su salida marítima a Chile, que ahora ha quedado temporalmente en suspenso.