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Bolivia redujo en 2013 área con plantaciones de hoja de coca

Martes, 24 de junio de 2014 - 09:15 UTC
Se está camino a alcanzar la meta de 20.000 hectáreas para 2015 según estableció Morales Se está camino a alcanzar la meta de 20.000 hectáreas para 2015 según estableció Morales

Bolivia redujo en 2013 por tercer año consecutivo las plantaciones de hoja de coca hasta situarlas en 23.000 hectáreas, la menor superficie desde el 2002, informó la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).

 El representante de la UNODC en Bolivia, Antonino De Leo, presentó el “Informe de monitoreo de cultivos de coca 2013″ en el Ministerio boliviano de Exteriores, en presencia del presidente Evo Morales.

La convención antidroga de la ONU mantiene la hoja de coca en su lista de sustancias controladas, ya que esta planta contiene el alcaloide base para sintetizar su derivado ilegal, la cocaína.

Según De Leo, el informe establece una disminución neta de cultivos de la coca en un 9% entre 2012 y 2013, al haber pasado la superficie de 25.300 a 23.000 hectáreas.

El responsable de la UNODC destacó que “la disminución confirma una tendencia decreciente en los últimos tres años”, durante los cuales el cultivo de la hoja de coca se redujo en un 26 %.

El Gobierno boliviano destruyó el año pasado 11.407 hectáreas de la planta, pero la cifra neta de erradicación fue de 2.300 hectáreas.

De Leo destacó, además, que Bolivia está camino de alcanzar el objetivo de reducir las plantaciones hasta las 20.000 hectáreas en 2015, una meta establecida por el Gobierno de Morales.

En 2013, la producción potencial de hoja de coca a nivel nacional se calculó en 36.300 toneladas métricas, de las que 19.150 toneladas (53 %) pasaron por los dos únicos mercados legales del país.

Tras la presentación del informe, el viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Felipe Cáceres, admitió, en una rueda de prensa, que “es una preocupación” que un 47 % de la coca existente en el país no pase por esos mercados legales.

“Ese porcentaje, por supuesto, (…) alimenta, lastimosamente la actividad del narcotráfico”, dijo Cáceres, máximo responsable de la lucha antidrogas en Bolivia.
Según el funcionario, los intermediarios, que no son los productores campesinos, desvían la producción de la coca a la de cocaína.