El comandante en jefe de la Armada rusa, el almirante Víctor Chirkov, anunció que Rusia aumentará la presencia de su agrupación naval en el Ártico y renovará sus flotas del mar del Norte y del océano Pacífico.
“El objetivo es fortalecer la agrupación de contención estratégica nuclear y no nuclear en las flotas del Norte y el Pacífico con nuevos buques”, dijo en una conferencia sobre seguridad en el Ártico celebrada en San Petersburgo, la segunda ciudad de Rusia. Agregó que, en particular, se trata de la construcción de rompehielos y la creación de unidades costeras especiales.
“La Armada tiene una tarea concreta que es la renovación por etapas de las fuerzas y las tropas de las flotas del Norte y el Pacífico con armamento y equipos especiales dentro del programa estatal de rearme y reformas”, señaló Chirkov, según la agencia Interfax.
Añadió que dichas actividades responden a lo estipulado en las Bases de la política del Estado ruso en el Ártico en el periodo hasta 2020. Moscú ha dejado claro en varias ocasiones que el Ártico es parte “inalienable” de la Federación Rusa, por lo que ese territorio no puede ser cedido bajo control internacional.
El presidente Vladimir Putin afirmó en diciembre pasado que el despliegue de infraestructuras y unidades militares en el Ártico debe concluir en el año 2014.
Rusia mantiene que es la mayor potencia ártica, ya que tiene el mayor número de kilómetros de costa que dan a esas aguas y la mayor ruta por el Océano Glacial Ártico.
Rusia, Canadá, Estados Unidos (gracias a Alaska) , Dinamarca (por Groenlandia) y Noruega son las principales potencias árticas que se disputan los nuevos territorios marítimos que ofrece el deshielo y que son ricos en recursos naturales.