La conclusión de acuerdos de libre comercio con Estados Unidos y con Mercosur es uno de los importantes retos que la Unión Europea tiene por delante, destacó el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy durante el discurso de clausura de la Conferencia sobre el futuro de Europa, que, organizada por el Instituto Berggruen y celebrado en Madrid.
Rajoy también apeló a apoyar en las elecciones europeas de mayo próximo a los partidos que apuestan por la integración, frente a las actitudes de quienes fomentan el desapego a la UE y buscan la división.
En el acto estuvieron presentes, entre otros, el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho; los ex primeros ministros italianos Mario Monti y Enrico Letta; el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, y el ex-presidente del Gobierno de España Felipe González.
Rajoy se refirió al tratado de libre comercio entre la UE y EE.UU. que se negocia y a un “ambicioso” acuerdo con Mercosur o con los países que conforman esta organización y que estén dispuestos a ello. “España está dispuesta a apoyarlo sin duda”, recalcó Rajoy al apostar igualmente por hacer más eficaces las instituciones europeas y por lograr que la UE tenga un papel relevante en la escena internacional, cuya necesidad considera que ha quedado demostrada a raíz de la situación en Ucrania.
En cuanto a las elecciones europeas, Rajoy alertó que, “a la sombra de la pasada crisis económica, algunos están alimentando el desapego hacia el proyecto europeo de manera no solo injusta, sino temeraria”, y consideró que esas actitudes “inquietantes” proceden de “una minoría que crece cada día”.
“El anti-europeísmo y la demagogia pretenden poner en cuestión principios básicos de la UE”, lamentó Rajoy, quien citó como ejemplo las voces en contra de la libertad de circulación, que considera “pilar básico de la UE” y “savia del mercado único” que ha pedido salvaguardar con determinación.
Para reafirmar el proyecto europeo, Rajoy defendió que la UE atienda a los problemas reales de los ciudadanos, entre ellos el desempleo y la vuelta del crédito a las empresas. También reclamó a la UE más apoyo hacia países que, como España, son frontera exterior de la Europa comunitaria para hacer frente a la inmigración ilegal, y estimó “imperativo” una política integrada en este asunto.
Rajoy destacó también los resultados de las reformas económicas que ha llevado a cabo su Gobierno para superar la crisis y los altos índices de desempleo. Las elecciones europeas son “un reto para el europeísmo”, declaró y defendió que en el próximo Parlamento Europeo haya una mayoría sólida de las fuerzas políticas que creen en la integración.