El candidato del gobernante Partido Liberación Nacional, Johnny Araya, y Luis Guillermo Solís, del centro izquierdista Partido Acción Ciudadana, se enfrentarían en una segunda vuelta el 6 de abril, según los primeros datos oficiales de las elecciones celebradas el domingo en Costa Rica y que fueran adelantados este lunes.
Araya obtiene el 36.24 % de los votos, mientras Solís el 21.08 %, según los resultados anunciados por el presidente del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Luis Antonio Sobrado, en una sesión solemne. En tercer lugar se ubica el aspirante del izquierdista Partido Frente Amplio, José María Villalta, con un apoyo del 17.37 %, mientras Otto Guevara, del derechista Movimiento Libertario, alcanza el 12.44%.
Para que un candidato se proclame presidente en primera vuelta necesita obtener el 40% más uno de los votos.
El presidente del TSE Luis Antonio Sobrado aseguró que la democracia de Costa Rica “goza de buena salud” e hizo un llamado para que los candidatos tomen los resultados con “humildad” y “respeto”, pues es hora de “demostrar la consistencia de nuestra fibra democrática”.
“El pueblo de Costa Rica se levantó a votar. Dimos testimonio al mundo de nuestra inquebrantable fe en la democracia. Demostramos que queremos vivir juntos respetando nuestras diferencias”, expresó el magistrado.
Sobrado felicitó a los candidatos, a la prensa, a los ciudadanos y a los funcionarios del TSE por el proceso electoral que vivió hoy el país.
“Por encima de cualquiera de los candidatos hoy ganó Costa Rica”, manifestó Sobrado, quien afirmó que el TSE no hará una declaración oficial de ganador hasta que finalice el escrutinio manual de votos, que comenzará mañana martes.
Para los comicios del domingo estaban habilitados para votar casi 3,1 millones de costarricenses para elegir al presidente, los dos vicepresidentes y los 57 diputados de la Asamblea Legislativa para el periodo 2014-2018.
El abstencionismo supera el 30%, muy cerca de lo registrado en las pasadas elecciones del 2010. De todos modos se estima que el próximo presidente 'tico', que asumirá el 8 de mayo, le tocará un Congreso variopinto y mayoritariamente de oposición, por lo que necesitará un talante negociador, agregó.
Los comicios, que transcurrieron en calma, se vivieron en una polarización entre derecha e izquierda, pero el electorado costarricense, tradicionalmente conservador, favoreció la opción de centro.
Considerado el gobierno el más impopular de los últimos 20 años, la presidente Laura Chinchilla deja al país con un déficit fiscal de 5,4% del PBI, una deuda pública de 50% de PBI y el primer lugar en América Latina en crecimiento de la desigualdad en el 2013.
Araya, quien intenta un tercer periodo consecutivo para el PLN, una agrupación socialdemócrata que viró a la derecha, trató de distanciarse de las críticas contra la gestión de Chinchilla, envuelto en escándalos de corrupción, prometiendo reactivar la economía y reducir la pobreza, estancada en el 20% desde hace dos décadas.