El ex presidente colombiano Álvaro Uribe ha reconocido que la actuación de la CIA de Estados Unidos durante el gobierno que encabezó entre 2002 y 2010 fue bajo su responsabilidad, aunque aseguró que los golpes contra la guerrilla de las FARC fueron con agentes de Colombia.
Uribe salió así al paso de un artículo publicado el domingo pasado por el diario 'The Washington Post' que señaló que al menos dos docenas de jefes de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) murieron en los últimos años en operaciones con participación de la CIA (Agencia Central de Inteligencia).
Varios observadores, militares retirados y el actual ministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzón, coincidieron en afirmar que la nota periodística no era una primicia, pues no es un secreto que Estados Unidos colabora desde hace años con las autoridades colombianas en el marco del conflicto armado que azota al país.
Bajo mi responsabilidad fueron operativos militares, escribió Uribe en Twitter, tras agregar que los ataques contra las FARC se realizaron con agentes y equipos de la fuerza pública colombiana y que Estados Unidos ayudó para detectar ubicación de narco secuestradores.
Las palabras de Uribe se conocieron después de que el ministro Pinzón dijera el lunes que todo el mundo sabe de la participación de la CIA en operaciones militares en territorio colombiano. La verdad es que todo el mundo sabe, esto no tiene nada de nuevo, que tenemos una cooperación fuerte, muy fuerte, con los Estados Unidos, expresó Pinzón.
Según 'The Washington Post', que entrevistó a más de 30 ex funcionarios estadounidenses y colombianos, el programa se puso en marcha durante la administración del presidente George W. Bush y continuó durante el gobierno de Barack Obama.
La publicación dijo que Estados Unidos suministró informaciones en tiempo real sobre el paradero de los dirigentes guerrilleros y apoyó ataques mediante un sistema de control que aumenta considerablemente la precisión de las bombas lanzadas sobre sus objetivos.
El diario señaló que entre los jefes guerrilleros que murieron en bombardeos con ayuda de la CIA están Tomás Medina, alias Negro Acacio (2007), y Luis Édgar Devia, alias Raúl Reyes (2008). En bombardeos de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) también murieron los dos principales jefes de las FARC, Guillermo Sáenz, alias Alfonso Cano (2011), y Víctor Suárez, alias Mono Jojoy (2010), aunque The Washington Post no relacionó esos ataques con la colaboración de la CIA.