El Primer Ministro Gordon Brown ratificó la soberanía británica sobre las Islas Malvinas, basada en la autodeterminación de sus habitantes, descartó cualquier tipo de negociaciones (con Argentina) al respecto y confirmó el apoyo total de Londres a la nueva etapa de exploración petrolífera que se ha iniciado en las Islas.
A medida que la plataforma semi-sumergible de exploración petrolífera Ocean Guardian, contratada por Desire Petroelum a Diamond Drilling, continúa su marcha hacia las Falkland Islands, se anuncia la visita de varios operadores de la industria para mantener conversaciones con autoridades del gobierno de las Islas.