El ex presidente brasileño Michel Temer (2016-2018) fue puesto en libertad este lunes tras pasar cuatro noches en prisión preventiva bajo la sospecha de ser el líder de una organización criminal que incurrió en delitos de corrupción durante los últimos 40 años.
No hubo declaraciones. Esa fue la consigna que adoptó el ex Presidente brasileño Michel Temer, durante un interrogatorio tras ser detenido el jueves en el marco del caso Lava Jato. No es algo nuevo, ya que según consigna G1, la defensa del ex Mandatario avisó a la Fiscalía General que él se mantendría en silencio.
La Policía Federal brasileña arrestó este jueves al ex Presidente Michel Temer (2016-2018) en un caso vinculado a la Lava Jato, como es conocida la mayor operación de combate a la corrupción en la historia de Brasil y que destapó un gigantesco escándalo de desvíos de la petrolera estatal Petrobras.
Los conductores de camiones brasileños bloquearon el lunes las principales autopistas alrededor de la capital del mayor estado granelero del país, Mato Groso do Sul, en protesta por los aumentos de los precios nacionales del combustible.
Un equipo que responde al vicepresidente de Brasil, Michel Temer, prepara un plan de gobierno en caso de que sea destituida la Presidenta Dilma Rousseff, que incluye la reducción de los fondos destinados a los programas sociales de vivienda, educación y combate a la pobreza y poner en la agenda la reforma del sistema jubilatorio y laboral y privatizaciones, publicó este domingo la prensa brasileña.
Mientras el gobierno de la presidente Dilma Rousseff intenta financiar proyectos de autopistas, caminos, puertos y vías férreas por más de 100.000 millones de dólares, hay dudas sobre la confiabilidad de las normas a seguir en Brasil. Los planes, anunciados en 2011, buscan apuntalar una economía que ha crecido poco en los últimos tres años.