Al finalizar 2020, habrá 1,2 millones pobres más entre los niños, niñas y adolescentes de Argentina en relación al año anterior, según un informe presentado hoy por Unicef que actualiza las estimaciones realizadas en mayo, cuando la organización pronosticaba que 750 mil niños, niñas y adolescentes (NNYA) caerían en esa situación para la misma época, por la pandemia de coronavirus.
Funcionarios de las Naciones Unidas, la Unión Europea y Cruz Roja anunciaron que trabajarán conjuntamente con el gobierno de la provincia argentina de Salta para dar respuesta a la emergencia sociosanitaria de las comunidades wichi locales.
Argentina no logra perforar el nivel de 30% de pobreza en niños y adolescentes, y en la actualidad la mitad está en esa condición, advirtió un informe distribuido a nivel mundial por Unicef. El trabajo sostiene que la principal deuda con la niñez está vinculada con la pobreza entendida como un problema estructural, que va más allá de la falta de ingresos.
Si bien el gobierno del presidente Mauricio Macri anunció con gran entusiasmo una reducción considerable de los índices de pobreza en Argentina, también es cierto que hubo algunos llamados a la cautela pues el país sigue con grandes desafíos y un análisis detallado de las cifras también revela grandes disparidades.