El sacerdote argentino Eduardo Lorenzo, acusado por abuso sexual infantil y bajo orden de arresto, fue hallado muerto de un disparo en lo que las autoridades investigan como suicidio, informó este martes una fuente policial.
El Papa Francisco anunció el martes cambios radicales en la forma en que la Iglesia Católica trata los casos de abusos sexuales a menores, aboliendo la regla del “secreto pontificio”, que ayudaba a encubrirlos anteriormente.
La asociación italiana Rete l'Abuso de víctimas de abusos sexuales por parte de religiosos denunció en Roma que en Italia ha habido 300 casos de curas denunciados por abusar de menores en los últimos quince años. Así lo aseguró el presidente de esta asociación, Francesco Zanardi, en un encuentro con la prensa extranjera en Roma, donde señaló que, de estos 300 casos, solo entre 150 y 170 curas han sido condenados de forma definitiva en el país.
El Papa Francisco no juzgó necesario este domingo comentar las graves acusaciones vertidas en su contra en un texto publicado por un ex nuncio, en el que se lo acusa de haber encubierto el accionar del cardenal estadounidense Theodore McCarrick, acusado públicamente en julio de abusos sexuales.
El Papa envió una carta a los católicos para expresar “vergüenza” y “arrepentimiento” por los casos de abusos y reconocer que la Iglesia no supo actuar ni reconocer la gravedad del daño que se causaba, tras el informe de Pensilvania. Francisco responde así con un inédito gesto, una carta enviada al Pueblo de Dios, al escalofriante informe revelado por la Corte Suprema de Pensilvania (EE.UU) que documenta 300 supuestos casos de “sacerdotes depredadores” sexuales en ese Estado y en el que identifica a 1.000 menores como víctimas desde 1940.
El vocero de la Conferencia Episcopal (Cech) de Chile, Jaime Coiro, aseguró que no tenía antecedentes de la destrucción de documentos al interior de la iglesia que investiga el fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, confirmando lo que señaló al respecto el obispo Fernando Ramos.
La diócesis de Rancagua, sur de Chile, informó el martes que decidió suspender a 14 sacerdotes involucrados en presuntos delitos sexuales. Las medidas se adoptaron tras un nuevo escándalo que involucra a miembros de la Iglesia Católica chilena, el cual fue destapado por una investigación periodística de el canal T13, que dio cuenta de abusos sexuales y conductas impropias por parte de un grupo de religiosos de Rancagua, quienes pertenecerían a una cofradía llamada La Familia.
En comentarios en el prólogo de un libro, el Papa Francisco calificó los abusos sexuales cometidos por sacerdotes contra niños como una “monstruosidad” y prometió que emprenderá acciones contra los perpetradores y los arzobispos que los protegen.