Las protestas contra las restricciones de acceso masivo de jóvenes de bajos recursos a los centros comerciales brasileños se extendieron con manifestaciones en Río de Janeiro, que siguieron las ocurridas en Sao Paulo en los últimos días.
Los “rolezinhos” constituyen una nueva actividad que realizan masivamente jóvenes brasileños, y consisten en auto-convocarse masivamente a través de las redes sociales en centros de compras. La justicia del país norteño aprobó una norma que autoriza a los shoppings a identificar a los participantes, en lo que se considera por muchos como una medida discriminatoria.