Apenas unos minutos antes del tiempo límite, políticos israelíes de la oposición notificaron al presidente Reuven Rivlin que habían llegado a un acuerdo para formar lo que sería el primer gobierno que involucra a alguien de ascendencia árabe.
El Parlamento israelí adoptó este jueves un proyecto de ley que define Israel como “el Estado nación del pueblo judío”, en el que se enmendó un polémico artículo que preveía reservar nuevas localidades para los judíos.