Por sexta noche consecutiva, Cataluña fue escenario este domingo de una protesta en apoyo al rapero Pablo Hasél, condenado por insultar a la monarquía y a las fuerzas de seguridad, en una jornada con menos incidentes que dejó, de todos modos, al menos ocho detenidos y siete heridos.
Miles de catalanes se concentraron el domingo en el centro de Barcelona bajo el lema Por la convivencia, por la democracia, por Cataluña: ¡Basta!, en rechazo a la violencia callejera y la escalada del conflicto secesionista, que se produjo tras penas impuestas a los líderes del intento de ruptura de 2017 hace dos semanas.
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, indicó que los incidentes violentos que se han registrado en los últimos días en Cataluña, en el marco de las protestas por la sentencia sobre los líderes del 'procés', no se pueden permitir.
El gobierno español subrayó su compromiso de garantizar la seguridad en Cataluña, ante la violencia que se está produciendo en las calles y que según denuncia son acciones coordinadas para romper la convivencia.