Finlandia se ha adherido finalmente a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en una decisión que duplica la frontera de Rusia con la mayor alianza de seguridad del mundo, asestando así un golpe estratégico al Presidente Vladimir Putin, que se ha quejado durante mucho tiempo de la expansión de la OTAN y en parte la ha utilizado como justificación para la invasión de Ucrania. Finlandia comparte 1.340 kilómetros de frontera con Rusia.