El Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia dijo este lunes que los comentarios de la Oficina del Presidente de la República Argentina (OPRA) sobre el intento de golpe de Estado del 26 de junio en La Paz fueron inamistosos e imprudentes. La Casa Rosada había sostenido que el levantamiento militar había sido un montaje y que, por lo tanto, calificarlo de revuelta era una denuncia falsa.